Más que hablar de un lenguaje de Umberto Eco, es posible reconocer una práctica semiótica, pues el filósofo desarrolló una línea de pensamiento sobre tal disciplina –que ha corregido y replanteado– y le ha dado una competencia para observar las fluctuaciones del sentido en fenómenos y objetos de estudio de la más diversa índole, consideró Iván Ruiz de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).

El académico participó en la mesa “El lenguaje de Umberto Eco”, desarrollada en el marco del Tercer Congreso Internacional de Investigaciones Literarias que organizó el Instituto de Investigaciones Lingüístico-Literarias de la Universidad Veracruzana.

“Sus andanzas intelectuales, efectuadas en bosques narrativos, estéticas medievales, conflictos políticos, interfaces tecnológicas o en cualquier otro fenómeno de su interés, nunca escapan a la problemática general del sentido y desde esa base pre-significante Eco modela tanto su lectura como su interpretación”, detalló Ruiz.

En la ponencia “¿Semiología cotidiana? Reflexiones sobre la práctica semiótica de Umberto Eco”, el catedrático de la BUAP dijo: “Eco es un autor que ofrece una singularidad, por ejemplo en el estudio de las semióticas textuales, en vocabulario de estudios semióticos y semiológicos”.

Consideró que su obra, en una primera aproximación, se presenta como una contradicción al rigor metodológico de la teoría semiótica, que somete a los objetos o fenómenos de estudio a una compleja descomposición y recomposición analítica basada en un modelo operativo.

Refirió el interés deliberadamente semiótico del filósofo por lo cotidiano, entendido como aquello que acontece diariamente, carente de una sobrevaloración estética y sobre lo cual se puede ejercitar una mirada afinada, “como una experiencia vivencial ligada al sentido de la vida”.

En ambos casos habría una fuerte resonancia al olfato semiológico que Eco define como “esa capacidad que todos deberíamos tener de captar un sentido, allí donde estaríamos tentados de ver sólo hechos, de identificar unos mensajes allí donde sería más cómodo reconocer sólo cosas”, dijo.

Semiótica y semiología son términos que de manera común se entienden como sinónimos, pero al interior de la disciplina hay un debate que Eco reanima a través de su interés semiológico por lo cotidiano.

Iván Ruiz añadió que la semiología se caracteriza por un estudio de los signos en el ámbito de lo verbal y la semiótica, pensada como disciplina, es un estudio de toda clase de signos, “de ahí su aspiración a consolidarse como una teoría general de los sistemas y procesos de significación, y no en una ciencia de los signos o una teoría general de los mismos”.

En la mesa también participó Lillian von der Walde Moheno con la conferencia “Aplicación de los estudios de estética medieval de Umberto Eco al ‘Retrato de María penitente’ ” y Alfredo Tenoch Cid Jurado con “Indexicalidad, iconismo y simbología en la obra literaria de Umberto Eco”, ambos de la de la Universidad Autónoma Metropolitana.

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