Matilde Petra Montoya Lafragua

Matilde Petra Montoya Lafragua


Sandra Isabel Jiménez Mateos *

Matilde Petra Montoya Lafragua, fue la primera mujer mexicana que se graduó en medicina, con el titulo de cirujano, en la Escuela de Medicina de la Universidad Nacional de México, a los 28 años de edad, porque tuvo que luchar e insistir para ser aceptada para cursar los estudios. El 25 de agosto de 1887 recibió el titulo de médico-cirujano y ese día, se desmayó.

Matilde Montoya, nació en la Ciudad de México, el 14 de marzo de 1859. Fue la segunda hija del matrimonio entre Soledad Lafragua y José María Montoya; sin embargo, fue educada como hija única, tras la muerte de su hermana. Desde muy temprana edad, Matilde comenzó a demostrar interés por el estudio. Con las enseñanzas de su madre, a los 4 años ya sabía leer y escribir y se convirtió en una ávida lectora; por insistencia materna, su padre aceptó pagar una enseñanza particular, cuando a la niña no la aceptaron en la Escuela Primaria Superior. Así, terminó su educación escolar a los 12 años, siendo demasiado joven para entrar a la Educación Superior.

Su inteligencia y conocimientos eran tan avanzados que a los 13 años presentó el examen para convertirse en maestra de primaria, el cual aprobó, pero por su edad no le dieron el puesto.

Su familia, pero sobre todo su madre, la impulsaron para que entrase a estudiar ginecología y obstetricia, tras la muerte de su padre, en la Escuela Nacional de Medicina, pero tuvo que dejar la carrera por las carencias económicas por las que atravesaba su familia, optando por inscribirse en la Escuela de Parteras y Obstetras de la Casa de Maternidad.

A los 16 años se graduó como partera y ejerció sobre todo en Puebla, hasta los 18 años.​ Trabajó, en sus comienzos, como auxiliar de cirugía bajo la tutela de los doctores Luis Muñoz y Manuel Soriano.

En Puebla, pidió su inscripción en la Escuela de Medicina, presentó tesis de su recorrido profesional y cumplió con el requisito de acreditar las materias de Química, Física, Zoología y Botánica, con lo que aprobó el examen de admisión.

Sin embargo sufrió agresiones, pues algunos médicos realizaron una campaña en su contra, al calificarla de «masona y protestante».

Matilde Montoya decidió regresar con su madre a la Ciudad de México, donde finalmente y por segunda vez solicitó su inscripción en la Escuela Nacional de Medicina, y fue aceptada en 1882 por el entonces director, el doctor Francisco Ortega, cuando tenía 24 años.

Matilde Montoya, la primera mujer en graduarse como médico en México

El que la admitiesen fue cuestionado, al grado de que a quienes la apoyaron para ser admitida, los llamaron «los montoyos».​

Las dificultades para graduarse

Matilde Montoya tuvo múltiples percances durante sus estudios en la Facultad de Medicina, entre ellos que le negasen reconocimiento de sus materias de bachillerato, de latín, raíces griegas, matemáticas, francés y geografía, por haberlas llevado en escuelas particulares. Ella pidió poder cursarlas por las tardes en el Colegio de San Ildefonso, sede de la Escuela Nacional Preparatoria, lo que le fue negado.

En ese trance, Matilde Montoya hizo algo que nadie había hecho: le escribió al presidente de México, Porfirio Díaz, quien a su vez le «sugirió» al director de San Ildefonso que le diera las facilidades para cursar las materias.

Recibió su doctorado de la Facultad de Medicina de México en 1887. Después fue declarada médica de cirugía y obstetricia. Se tituló con la tesis «Técnicas de laboratorio en algunas investigaciones clínicas», pero inicialmente le negaron realizar el examen profesional, alegando que en los estatutos de la escuela se hablaba de «alumnos», no de «alumnas».

Matilde Montoya recurrió nuevamente a Porfirio Díaz. Y esto provocó un cambio mayor, pues éste envío una solicitud a la Cámara de Diputados para que se modificasen los estatutos de la Escuela de Medicina y que se permitiese a las mujeres poderse graduar como médicos.

Como la Cámara de Diputados no estaba en sesiones, Porfirio Díaz emitió un decreto para que le permitiesen a Matilde Montoya presentar su examen profesional el 24 de agosto de 1887. Para completar el panorama, el presidente anunció que asistiría y lo que iba a ser un evento en un pequeño salón, se trasladó al salón de actos solemnes. Pero el jurado, el más estricto de la escuela, siguió siendo el mismo. Y las preguntas fueron lo más rigurosas posibles durante dos horas, a las cuales contestó correctamente y al concluir recibió un fuerte y caluroso aplauso.

El día que Matilde Montoya se desmayó

Al día siguiente fue la prueba práctica en el Hospital San Andrés, ya sin la presencia de Porfirio Díaz, quien no pudo asistir. Después de las pruebas, el jurado se retiró a deliberar y al regresar la nombraron «la primera mexicana con el titulo de Doctora de la Escuela de Medicina de México». Ese fue el momento en que Matilde se desmayó. Sus compañeros tuvieron que reanimarla para que pudiera disfrutar el momento.

Durante sus estudios recibió diversos apoyos económico, que dejó de percibir cuando se tituló. El gobierno de México le otorgó una mensualidad de 40 pesos y los gobernadores de Morelos, Hidalgo y Puebla le asignaron pensiones útiles, aunque pequeñas. El general Terán, gobernador de Oaxaca, la nombró recolectora de pus vacuno (para vacunación contra la viruela) en esa capital, con un sueldo de 30 pesos mensuales. En diversas ocasiones el presidente Díaz le proporcionó una cantidad con la que adquirió libros de texto o un estuche de cirugía.

El 19 de agosto de 1891, registró ante el Consejo Superior de Salubridad, el título que la acreditaba como médica cirujana que le fue expedido por la Junta Directiva de Instrucción Pública el 24 de septiembre de 1887.

Matilde Montoya creo la Sociedad Filantrópica y dentro de sus actividades organizó en 1890, un taller de costura destinado a obreras en la casa número 305, junto al templo de San Fernando. En 1891, junto con las señoras de la Sociedad “Luz y Trabajo”, fundó la Escuela-Obrador: Luz y Trabajo para hijas de obreras. Perteneció a la Sociedad Mexicana de Costureras “Sor Juana Inés de la Cruz”, de la que fue presidenta de hacienda para el periodo 1898-1899 y fue socia de número del Ateneo de Mujeres. En 1891 formaba parte de la Liga Médica Humanitaria, asociación que reunió a médicos, dentistas, parteras y farmacéuticos con el objetivo establecer varios consultorios médicos nocturnos, en los que gente sin recursos económicos pudieran encontrar a toda hora de la noche médicos o parteras a precios módicos. Dictó algunas conferencias, entre estas en 1907 la Liga Antialcohólica la invitó a hablar sobre los estragos de la embriaguez.

En 1925, junto con Aurora Uribe fundó la Asociación de Médicas Mexicanas.

Su trabajo fue reconocido, ya en el ejercicio profesional, tanto que logró que el término partera no se usara de manera despectiva.​ Precisamente por esto es que fue una de las mujeres más vitoreadas y una de las que más se hablaba en esta época.

Falleció el 26 de enero de 1939, en la Ciudad de México.

Tuvieron que pasar 38 años después de que Elizabeth Blackwell se convirtiese en la primera mujer en conseguir el titulo de medicina en Estados Unidos (11 de enero de 1849), para que Matilde Montoya pudiera obtener el titulo de médico en México.

Matilde Petra Montoya Lafragua
Matilde Petra Montoya Lafragua
  • Investigadora académica del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales (IIESES), Universidad Veracruzana

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