Un grupo de investigación internacional ha confirmado una especie de murciélago chino como el origen del mortal virus del síndrome respiratorio agudo severo (SARS, según siglas en inglés), aparecido por primera vez en 2002.

     El grupo, liderado por el científico chino Shi Zhengli, del Instituto de Virología de Hunan, subordinado a la Academia de Ciencias de China (ACCh), ha aislado un coronavirus similar al SARS a partir de ejemplares de Rhinolophus rouxii, una especie de murciélago extendido en China y el Sudeste Asiático, reveló hoy jueves la ACCh.

     Los últimos resultados del estudio, publicados el 30 de octubre en la versión en línea de la revista Nature, confirma una investigación de 2005 según la cual los murciélagos son huéspedes naturales para los coronavirus de tipos estrechamente relacionados con el SARS.

     Se ha informado de varios coronavirus presentes en otras especies de murciélagos en China, Europa y África, pero ninguno se considera un progenitor directo del coronavirus del SARS. Los dos nuevos coronavirus aislados de los murciélagos originarios de la provincia suroccidental china de Yunnan están mucho más estrechamente relacionados con el del SARS que los anteriormente identificados, y pueden infectar células humanas, de cerdo y de mono, dijeron los investigadores.

     El virus del SARS se cobró la vida de unas 800 personas durante 2002 y 2003. Anteriormente se creía que el origen del virus eran las civetas vendidas en mercados de animales, pero las pruebas sugerían lo contrario.

     Los murciélagos transportan otros virus, entre ellos de la familia de los paramixovirus, pero las probabilidades de contagio humano son escasas, según los científicos.

     Los murciélagos juegan un papel importante en los ecosistemas, y la mejor forma de evitar las infecciones provenientes de los mismos y de otros animales salvajes es proteger sus hábitats, concluyeron.

Los comentarios están cerrados.