BERLÍN (dpa) – Lo bueno, si breve, dos veces bueno. El refrán podría aplicarse también a teléfonos celulares y fijos dedicados a personas mayores. Sin embargo, no todos los teléfonos que se vendan para mayores y ofrezcan sólo funciones básicas son fáciles de manejar.

      Botones demasiado pequeños o menús demasiado complicados enervan a cualquier usuario de teléfono móvil. Pero, tratándose de personas mayores, es especialmente importante que el teléfono -fijo o celular- sea fácil de utilizar. Los adornos innecesarios sólo complican la vida.

      “La mayoría de las personas mayores tienen un teléfono móvil sólo para pedir ayuda en caso de urgencia”, dice Nicola Bilstein, economista de la universidad católica alemana de Eichstätt. “Sólo unos pocos buscan estar siempre localizables, e incluso un mensaje SMS es para muchos algo ya demasiado impersonal”.

      Dentro del marco del proyecto MIDIS, del Ministerio alemán de Educación, Bilstein investiga las necesidades técnicas de las personas mayores.

      Pero, ¿qué tiene de especial un teléfono para personas mayores? “En un teléfono móvil, las teclas deben ser grandes y la pantalla bien legible”, dice Bilstein, resumiendo las exigencias más importantes de los entrevistados en su investigación. “Por otra parte, no debe tener necesariamente la apariencia de un teléfono para personas mayores, con grandes teclas”. Lo que se exige es precisamente algo intermedio entre la funcionalidad y el diseño.

      “Algo se ha hecho ya en este sentido y, desde el punto de vista óptico, hay teléfonos para mayores decididamente más elegantes que hace dos años”, dice el experto Markus Eckstein, de la revista alemana “Connect”. Los primeros modelos parecían aparatos de hospital, señala, “pero esos toscos accesorios ya no existen o sólo escasamente”.

      Precisamente para personas de edad, un teléfono debe tener una buena calidad sonora: “Lo importante es entender bien a la otra persona”, dice Bilstein. Personas con discapacidad auditiva exigen por añadidura que tanto el altavoz como el tono de llamada sean perfectamente audibles. Más aún, personas que lleven audífonos especiales deben cuidar la compatibilidad del teléfono. También es útil una señal óptica para recibir llamadas, tanto para teléfonos fijos como móviles.

      Otras funciones son discutibles. “Hay quien quisiera una función de llamada de urgencia”, dice Eckstein. Muchos móviles para personas de edad disponen ya de un botón de urgencia. En la red telefónica alemana, cuando se pulsa este botón el teléfono marca varios números sucesivamente hasta que alguien responde. Algunos teléfono incluyen también adicionalmente el envío de un SMS. Si responde un contestador automático, algunos celulares detienen la llamada de urgencia. Por ello, se aconseja a familiares y amigos no usar el contestador automático.

      En la compra de un aparato, más importante que las teclas grandes es el menú, que debe ser fácil de manejar. “No todos los fabricantes han desarrollado estructuras de menú fáciles”, critica Eckstein. Lo importante es tomar el aparato en las manos “y allí se ve rápidamente qué funciona y qué no funciona”, dice el experto.

      Pero incluso los modelos más simples, sin un menú desarrollado especialmente pueden ser una alternativa. “Con un poco de práctica se puede aprender a manejar un celular simple”. El especialista recomienda los teléfonos plegables, pues “en los teléfonos de una pieza, la pantalla y el teclado suelen ser demasiado pequeños”.

      Son también recomendables los teléfonos tipo “outdoor”, aparatos robustos, a prueba de golpes e impermeables. En todo caso, no hay un teléfono para todos. “Cada persona es diferente en lo que respecta a su afinidad por la técnica”, dice la economista.

      Personas mayores interesadas tampoco deben tener miedo a los teléfonos inteligentes con acceso a Internet y pantalla táctil. La multiplicidad de funciones quizás pueda parecer desconcertante a primera vista, pero para ello hay aparatos que poseen una pantalla muy fácil de entender, y hay algunos muy conocidos que son muy fácilmente manejables.

      Markus Eckstein está convencido de que las pantallas táctiles para personas mayores son una buena cosa y acabarán imponiéndose. La condición es que los fabricantes saquen aparatos con sistema operativo dedicado a personas de más edad, con una pantalla grande y una interfaz fácil de adaptar. Porque actualmente los sistemas operativos establecidos no les hacen la vida fácil ante el PC.

      dpa lo box

 

 

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