A las 03:20 GMT del 15 de febrero, un objeto natural ingresó en la atmósfera terrestre y se desintegró en el cielo sobre Chelyabinsk, Rusia, donde liberó una energía equivalente a 500 kilotones de TNT – unas 30 veces más que la bomba atómica de Hiroshima – cuando explotó a unos 15 – 20 kilómetros sobre la superficie de nuestro planeta.

Una larga colección de vídeos amateur muestran que el asteroide siguió una trayectoria de noreste a suroeste, con un ángulo de apenas 20° sobre la horizontal. Se calcula que su velocidad de entrada fue de unos 18 km/s – más de 64.000 km/h. 

Según los cálculos de Peter Brown, de la Universidad del Oeste de Ontario en Canadá, basados en las ondas acústicas de baja frecuencia detectadas por una red global de monitorización, el objeto tendría unos 17 metros de diámetro y una masa de 7.000 – 10.000 toneladas cuando entró en contacto con la atmósfera.

Los modelos actuales indican que se podría esperar un evento de esta magnitud una vez cada varias decenas o cientos de años.

 

Sin relación el asteroide 2012 DA14

 

Entrevista a Nicolas Bobrinsky, Responsable del programa de la ESA para el Conocimiento del Medio Espacial (SSA), y Detlef Koschny, responsable de las actividades de este programa relacionadas con los Objetos Próximos a la Tierra, sobre el evento.

¿Hubo alguna relación entre este evento y la aproximación del asteroide 2012 DA14, que ese mismo día a las 19:27 GMT pasó a tan sólo 28.000 km de la Tierra?

DVK: La trayectoria, el punto de entrada en la atmósfera y la separación temporal entre los dos eventos indican que el objeto caído en Rusia no guardaba ninguna relación con el asteroide 2012 DA14.

¿Cuál fue la causa de los daños registrados?¿Alguno de los fragmentos alcanzó a personas o edificaciones?

DVK: Muchos medios informaron de que la onda expansiva había roto ventanas y causado daños estructurales en varios edificios de la ciudad de Chelaybinsk. Estadísticamente, los primeros daños se producen cuando la presión de la onda es 5 veces superior a la normal a nivel del mar. La rotura generalizada de ventanas ocurre cuando se supera unas 10-20 veces este valor. 

La explosión y la bola de fuego avanzaron a lo largo de una trayectoria muy estrecha; la onda expansiva resultante, cilíndrica, se pudo haber propagado directamente hacia el suelo, concentrando su intensidad.

Es muy probable que la fase final de la explosión tuviese lugar directamente sobre Chelyabinsk, lo que contribuyó en gran medida a los daños generalizados en la ciudad. 

Estamos esperando a que las autoridades rusas confirmen la recuperación de trozos del objeto – fragmentos del meteorito – en la región. No conocemos ningún informe que indique que alguno de estos fragmentos haya alcanzado a personas o estructuras.

¿Se han producido eventos similares en el pasado?

DVK: Sí. Quizás el suceso más famoso de la historia reciente sea el acaecido en Tunguska en 1908, cuando un gran meteoroide o un fragmento de cometa, de unos 40 metros de diámetro, explotó a unos 5-10 kilómetros sobre el terreno. Es el mayor evento del que se guarda un registro, aunque la historia geológica de nuestro planeta presenta pruebas de impactos mucho más potentes. 

El 12 de febrero de 1947 cayó un objeto en Sijoté-Alín, en la antigua Unión Soviética. En esa ocasión el bólido era de hierro, lo que significa que depositó la mayor parte de su energía, unos 10 kilotones de TNT, directamente sobre el terreno, en lugar de explotar en el aire como el de la semana pasada. 

El 8 de octubre de 2009 se pudo observar una bola de fuego similar a la de la semana pasada sobre las islas de Indonesia. Su energía fue de unos 5 kilotones. 

¿Cuál es la probabilidad de que se produzca un evento similar en el futuro?

DVK: Los Objetos Próximos a la Tierra (NEOs, en su acrónimo inglés) son asteroides o cometas en órbita al Sol, de unos pocos metros a decenas de kilómetros de diámetro, cuya trayectoria se cruza o pasa cerca de la de nuestro planeta.

A día de hoy, sabemos que existen más de 600.000 asteroides en el Sistema Solar; de los que más de 9000 están catalogados como NEOs. En cuanto se descubre un nuevo objeto, se calcula su trayectoria y se elabora un perfil de riesgo. La ESA mantiene una lista pública en  http://neo.ssa.esa.int/web/guest/risk-page.

¿De dónde obtiene la información el equipo de SSA de la ESA?

DVK: Al igual que la NASA u otras agencias espaciales de carácter nacional, la ESA mantiene una estrecha colaboración con organismos de intercambio de información científica y técnica y con cuerpos gubernamentales. También colaboramos con los equipos de NEOs de la NASA y de las distintas agencias espaciales nacionales de Europa. 

¿Cómo se desarrollaría una alerta de asteroide?

DVK: Un buen ejemplo es el caso 2008 TC3, un objeto de 80 toneladas y 2-5 metros de diámetro que impactó en el desierto de Sudán el 7 de octubre de 2008. Era muy pequeño, por lo que fue descubierto por casualidad apenas 20 horas antes del impacto. Las primeras simulaciones indicaban un área de impacto de unos 2.000 kilómetros de extensión, pero con el paso de las horas esta estimación se refinó hasta determinar que caería sobre el desierto de Sudán. 

Si se produjese un evento similar en el futuro, las autoridades civiles podrían avisar a la población en la zona de impacto para que se mantenga alejada de las ventanas, cristales u otras estructuras y para que permanezca en casa. El riesgo de que una explosión en el aire causase daños físicos se reduciría considerablemente.

Los comentarios están cerrados.