En México, es factible que más de la mitad de las aguas municipales recolectadas por los sistemas de drenaje, no son tratadas, de acuerdo con la Oficina de Información Científica y Tecnológica para el Congreso de la Unión (INCyTU).
Los costos por la contaminación del agua en México se estiman en 57 mil millones de pesos (0.3% del PIB), pero el monto monetario por los daños ambientales asociados asciende a 900 mil millones de pesos (5% del PIB) anuales, de acuerdo con un artículo publicado por la Oficina INCyTU.
De acuerdo con los datos oficiales recopilados por INCyTU, en México se reporta que el 43% de las aguas residuales colectadas quedan sin tratar. Sin embargo este porcentaje puede ser mucho mayor, porque más de la mitad de las 2,477 plantas de tratamiento municipales que existen en el país presentan una calificación de mala a pésima en su funcionamiento.
Las aguas negras o aguas residuales son aquellas cuya calidad ha sido afectada negativamente por la actividad humana. Proceden de viviendas, poblaciones y áreas industriales y arrastran contaminantes y detritos.
Fases del ciclo urbano del agua
El mal funcionamiento de las plantas de tratamiento de aguas negras es un problema fundamental, que se debe principalmente a tres factores: las grandes cantidades de energía eléctrica necesarias para su operación, los costos asociados a la adquisición de lodos activados y materiales especiales y los costos por funcionar con un volumen de aguas residuales que excede su capacidad.
Algunas consecuencias dañinas al medio ambiente que resultan de la falta de tratamiento de aguas, son:
•Toxicidad: afecta directamente a la flora y fauna de los cuer-pos que reciben el agua contaminada y a quien la beba.
•Infecciones: diferentes organismos patógenos son transmi-tidos a través del agua, que afectan a los organismos terres-tres y marinos con los que entran en contacto.
•Contaminación térmica de las reservas que contienen el agua: los líquidos industriales pueden elevar la temperatu-ra de las zonas donde se desechan.
•Malos olores: las bacterias y sustancias contenidas en aguas residuales generan gases, resultado de la descomposición.
La experiencia internacional muestra que las afectaciones ambientales son serias y difícilmente reversibles en el corto plazo. En China, 80% de sus ríos están tan contaminados que ya no son aptos para uso humano. En Estados Unidos, las au-toridades han tenido que advertir a los habitantes y visitantes que no pesquen ni se bañen en las aguas de dos de cada cin-co ríos. De esta manera la población que tiene algún tipo de contacto directo o indirecto con los afluentes se ve afectada por la contaminación.
México enfrenta una situación de sobreexplotación de los mantos acuíferos, ya que no se han construido las condiciones que brinden la oportunidad de recarga, por lo que resulta crucial incrementar el tratamiento de las aguas residuales.