Era el grito de cansancio ante la ola de violencia que arrastra consigo la muerte.
– ¿Cómo estamos?
“Hasta la madre” decía el coro.
Era la marcha que arrancaba, pidiendo justicia por los homicidios de los catedráticos José Luis Blanco Rosas y José Luis Martínez, asesinado en Veracruz, así como por la periodista Regina Martínez.
La caminata empezó en la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana, dónde está la Facultad de Sociología, en la cual impartía clases el maestro asesinado.
Estudiantes y académicos, de Sociología y de otras instituciones de la UV, avanzaban por el centro de Xalapa.
El suave viento primaveral movía lánguidamente las banderas negras que se portaban, propalando el duelo por el maestro, el compañero, el amigo/ asesinado.
En la Plaza Lerdo esperaron el cortejo fúnebre de José Luis Banco y junto con ellos espero el megáfono puesto en el piso. Víctor Andrade tuvo el arrojo suficiente y lo enarboló para reclamar la ola de asesinatos que se presentan en Veracruz.
En la caminata y la espera las consignas continuaron:
– ¿Qué queremos?
“Jus-ti-cia, Jus-ti-cia”, respondía el coro.
A las 11 de la mañana la carroza que transportaba el féretro del catedrático se detuvo frente a Palacio de Gobierno y el reclamo se volvió unánime:
¡Justicia! ¡justicia! ¡justicia!
“¡Ni un asesinato más!”, era el énfasis.
Esa fue una parada especial, porque la carroza venia de la iglesia María Madre y se dirigía al panteón Xalapeño.
Las lonas ya estaban listas:
“Culpamos al nivel de impunidad en Veracruz de asesinatos contra: periodistas, catedráticos, estudiantes, mujeres y ciudadanos”
“¡Castigo a los culpables de los asesinatos de los drs. Martínez Aguilar y Blanco Rosas!”.
Y la petición reiterada por cada rincón del país: “no más violencia”.
Era, aún con todo eso, una marcha pacífica, que rápido avanzó.
El ritmo lo marcó la entonación:
– José Luis blanco/ PRESENTE
– Regina Martínez/ PRESENTE
– José Luis Martínez / PRESENTE
Y otra vez la pregunta de respuesta consabida
¿Cómo estamos? /hasta la madre
¿CO-MO ES-TA-MOS? /// HAS-TA-LA-MA-DRE
Y la petición/reclamo/orden/súplica/grito/susurro:
“Ni un muerto más”.
La medida está llena con la muerte de José Luis Blanco Rosas.
Y precisamente así es porque en la plaza, escrito en el piso estaba el recordatorio: “los veracruzanos tenemos memoria”.
Y alguien decía: “Y de alguna forma vamos a cobrar la factura”.
La versión oficial
La Procuraduría General de Justicia (PGJ) del Estado de Veracruz tiene abierta la investigación ministerial 458/2012 por el asesinato del profesor universitario José Luis Blanco Rosas, de 53 años de edad, tras confirmarse, por la necrocirugía de ley, que murió por asfixia, entre las 00:00 horas y las 02:00 de la madrugada del domingo 27 de mayo, en el interior de su domicilio ubicado en la calle Altamirano, de Xalapa.
Las autoridades ministeriales dicen seguir “diversas líneas de investigación”, una de las cuales es el robo, ya que sustrajeron varios aparatos de valor del domicilio, así como su vehículo particular que se encontraba en la cochera, pero también aseguraron investigar otras líneas a partir de la información proporcionada por la familia maestro universitario.
Según declaraciones de la madre de José Luis Blanco, el domingo, al irlo a buscar a su estudio, lo encontró sin vida y de inmediato dio aviso a las autoridades.
El departamento de identificación se presentó en el lugar de los hechos para la búsqueda de huellas dactilares; en el Servicio Médico Forense fue realizada la pesquisa de fibras, cabellos y raspado de uñas, tanto en el cadáver como en la indumentaria, lo anterior fue llevado a cabo por los departamentos de química y genética forense, respectivamente.
La galería en: http://184.173.18.166/~alefmx/foto.php?igp=28