A Contracorriente, un destello de color

A contracorriente, un exposición de José de Jesús Chan

Xalapa, Ver.- En la obra artística uno retrata lo que conoce y la vida que ha tenido, así como las cosas con las que uno no está conforme, y esa es una de las características de la obra de José de Jesús Chan, que presentó su exposición “A Contracorriente” en la galería Alva de la Canal.

Entre los amigos, Chan platica y se toma fotos con los amigos, las charolas con canapés y copas de vino pasan de un lado a otro, el pintor se ve contento y tranquilo, está dispuesto a una entrevista.

Una de las características principales de su obra es que es a mano, ¿qué opina de las técnicas digitales?

“Es válido, todas las expresiones artísticas son válidas, pero en los nuevos procesos creo que hay que tener cuidado, porque para realizar una obra parece que hay programas y resulta que todos tienen los mismos, por lo que hacen lo mismo, creo que hay que hacer un poco de investigación con esos programas para poder decir que se sigue un estilo o se sigue una línea. Asimismo, para no dejar de ver lo que está atrás, porque estas nuevas tendencias que les llaman emergentes generalmente surgen en un momento y después desaparecen. Creo que hay que ver un poco hacia atrás, que no se acabe la naturaleza misma del arte”.

¿Cree que el tiempo que usted le dedica a una obra sea diferente a lo que alguien le dedica a su obra usando medios digitales?

“Es lo mismo, cuando tu tienes la técnica y quieres hacer una obra, debes pensar antes de hacerla, eso lleva su tiempo, pero creo que todos estamos haciendo nuestro trabajo aunque no sea pintura, cualquiera que sea es un proceso al que debe dedicársele tiempo”.

¿Nos puede hablar un poco de esta exposición, cuáles son los temas principales y las técnicas que utilizó?

“El tema principal es un poco la vivencia de uno, en este caso, la mía, donde vivo, Veracruz. Ya empiezo a dibujar mar y peces que es lo que me está gustando ahora. En cuanto a las técnicas, usé al temple, con tierras de la región, el rojo es de Naolinco, un amarillo de Coatepec. También óleos, donde cuento una historia, porque hay más chance de narrar visualmente; hay grafito, grabado, litografía y linóleo, que me encanta porque yo lo sigo usando de la manera en que se pueden denunciar cosas, como se usaba tradicionalmente, eso me encanta; por ejemplo, hay una pieza que se llama Café de Altura, que si lo analizas es la situación del campo, es pequeño, pero es no estar ausente de la situación”.

José de Jesús Chan tiene una larga trayectoria, hace dos meses expuso en Canadá y ha obtenido doce premios a nivel nacional, entre ellos, el premio de Adquisición en la bienal de Guanajuato y uno en la de Chiapas, el Hermenegildo Bustos de Guanajuato, una mención en Nayarit, una la refresquería Pascual. En las bienales de San Juan Puerto Rico, Yucatán y Tijuana fue seleccionado.

Por el momento está trabajando para subir sus piezas a una página y su plan es no dejar de trabajar al ritmo que lo ha hecho, porque comenta que en toda esta exposición, de al menos unas 20 piezas, ha invertido un poco menos de un año

José de Jesús lleva 30 años viviendo aquí, lo que lo llamó fue la escuela de arte, porque en ese tiempo sólo Xalapa ofrecía una licenciatura. En Chiapas había talleres y también en Yucatán y bueno, México, que sí tenía la licenciatura, pero a “mí me gustaba Xalapa y ha sido una ciudad padrísima, he logrado hacer muchas cosas, además es un punto estratégico para moverse al mundo, eso me gusta mucho”.

La pintura de la foto es el pintor de niño, de la camisa del niño sale una estampita del Santo Niño de Atocha, santo al que lo encomendó su madre. La figura está rodeada de iguanas, que en palabras del pintor tiene que ver con que siempre le decían que hiciera caso porque parecía que siempre “una iguana le pasaba de un oído al otro”.

ENTRE LA LUZ Y LA LINEA FINA

“A contracorriente”, es un destello de color, plasmado por José de Jesús Chan, en obras que hacen gala del detalle y manejo de la luminosidad hasta formar poemas en imágenes.

Su obra tiene además la luminosidad de su identificación con la cultura latinoamericana y un reflejo del candor de nuestro Estado.

La galería Alva de la Canal se llena de luz y color con esta obra inspirada en los versos “No acabarán mis flores, no acabarán mis cantos” del poema “In Xóchitl in cuícatl” (Flor-canto) de Ernesto Cardenal.

Entre los asistentes el doctor David Caraza, artista plástico local, se dijo impresionado por el manejo de la luz y la línea tan fina del dibujo y por el uso del color, que considera un reflejo del corazón de José de Jesús Chan.

Comentó que la relevancia del arte en la sociedad actual es vital, porque se trata de una proyección del espíritu humano, y donde no hay arte los hombres se vuelven animales.

Dijo que nuestros gobernantes no han desarrollado su sensibilidad, ni siquiera hay apertura a los artistas para exponer sus obras en las galerías del gobierno, por ello es necesario crear muchos más espacios como la galería Alva de la Canal que promuevan y alberguen el arte.

Por su parte Gerardo Pérez, quien asistió a la exposición, dijo que lo más llamativo de Chan es su capacidad para dominar espacios grandes, que tienden al mural, sin perder los mínimos detalles e impresionando a quienes observan su obra.

Agregó que para pintar, es importante pensar en quienes verán la obra al momento de que sea expuesta y en este sentido Chan es cuidadoso de dejar huella en quienes observan su obra.

Cabe mencionar que la galería Alva de la Canal ha albergado a artistas nacionales y extranjeros por 27 años, se ha constituido como un espacio abierto al público que promueve el arte en todas sus formas, desde la pintura, la poesía hasta la cerámica.

Se fundó en 1985 a iniciativa del rector Carlos Manuel Aguirre Gutiérrez y con la asesoría del entonces director de la Facultad de Artes Plásticas, Rafael Villar, y su nombre se debe a un homenaje al artista Ramón Alva de la Canal.