Dolores Susana González Cáceres, del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) de la UNAM, participó en el XVI Encuentro Internacional de Didáctica de la Lógica y el Tercer Simposio Internacional de Investigación en Lógica y Argumentación, realizado en la Unidad de Humanidades de la Universidad Veracruzana (UV), en donde dictó la conferencia “Convergencia, a través de la argumentación, la lógica informal y el pensamiento crítico, entre las asignaturas de Taller y Redacción III y la de Filosofía I, en el CCH”.
Durante la misma, la académica planteó “¿Cómo es posible tratar de formar en un alumno los conceptos de argumentación y pensamiento crítico, cuando ni siquiera sabe qué es el sujeto-verbo-objeto o no tiene los elementos para distinguir las palabras de acentuación aguda, grave y esdrújula?”.
Lo anterior, mencionó, se enmarca en el llamado “enfoque comunicativo”, que registró una amplia aceptación desde la segunda mitad del siglo pasado por su incidencia en el estudio del lenguaje, semiótica, pragmática, lingüística y sociología, entre otros renglones de conocimiento humano.
Agregó que en el CCH se pretende una reforma en los programas de enseñanza. Los contenidos de la primera materia, Taller y Redacción III, tienen que ver con las formas icónicas y verbales, la situación comunicativa, el comentario político, los recursos retóricos, la constitución de referentes y muchos más. Son varios los temas que se relacionan directamente con la materia de Filosofía I, y apuntan hacia una argumentación y desarrollo de pensamiento crítico entre los alumnos de nivel bachillerato.
Esto representa un reto para los profesores, porque si no hubo una formación filosófica previa, resulta muy complicado tratar de comprender adecuadamente diversos renglones de la comunicación, sobre todo si tomamos en cuenta que un comunicólogo no ha contado con la Lógica como materia de formación. “Es allí donde radica el problema de cómo deben reformularse los programas”, expuso.
“Los estudiantes del CCH abordan en el tercer semestre la materia Taller y Redacción III, y hasta el quinto semestre se involucran con Filosofía I”, explicó la ponente. La intención es revertir este orden y González Cáceres criticó que todo se base en el enfoque comunicativo.
“Como profesora de Redacción, veo que a los alumnos les falta la parte normativa de nuestra lengua, no es posible que queramos aprender reglas ortográficas y de fonética sin contar con ello. No todo lo podemos circunscribir a asuntos de comunicación, porque muchos alumnos ni siquiera guardan idea de qué es una palabra aguda y dónde lleva el acento.”
Por tanto, debe darse la incursión en asuntos de la lengua normativa. Propuso incluir una materia que apunte hacia el asunto de las falacias, porque con ello los estudiantes contarán con los antecedentes necesarios para comprender el porqué del recurso de la inclusión de elementos falaces en la publicidad. Muchos de los mensajes lingüísticos son eso, falacias. “Y si entramos en este tema, debemos dejar bien claro esto”.
El también académico del CCH, Juan Manuel Campos Benítez, hizo un análisis en torno de los procedimientos comercialistas que recurren consistentemente a las falacias publicitarias en televisión.