El costo social de la patología es de 85 mil millones de pesos al año, esto equivale a la mitad del presupuesto para la construcción del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México de acuerdo a IMCO
Cambiar los hábitos alimenticios es 21 veces más barato que enfrentar las complicaciones de diabetes tipo II. Una persona con prediabetes y obesidad que modifica su dieta y realiza actividad física genera un gasto de 92 mil 860 pesos en 30 años; sin embargo, si no cambia su alimentación y presenta complicaciones por la enfermedad puede llegar a invertir 1.9 millones de pesos en el mismo periodo, de acuerdo a los cálculos realizados por el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), un centro de investigación aplicada, fundado en 2004.
Fátima Masse, consultora de IMCO, al presentar el estudio Kilos de más, pesos de menos, explicó que cada año se pierden más de 400 millones de horas laborales por diabetes asociada al sobrepeso y obesidad (SPyO), lo que equivale a 184 mil 851 empleos de tiempo completo.
Destacó que las complicaciones de la diabetes pueden llevar a una familia a la banca rota. Por ejemplo, una persona con prediabetes y obesidad de 45 años que no cambia su alimentación, puede invertir 65 mil 868 pesos al año en gastos médicos que tratan el padecimiento, cuando el ingreso promedio anual para vivienda, alimentación, educación, salud y ahorro es de 61 mil 896 pesos.
Actualmente, reportó IMCO, existen en el país ocho millones de diabéticos asociados directamente con SPyO, de los cuales 45 por ciento no sabe que padece la enfermedad y solo 48 por ciento de personas diagnosticadas reciben tratamiento.
El costo social de la diabetes es de 85 mil millones de pesos al año, 73 por ciento en gastos por tratamiento médico, 15 en perdida por ausencia laboral y 12 por muerte prematura. “Esto equivale a la mitad del presupuesto de la construcción del nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México” señaló Fátima Masse.
Precisó que México vive una epidemia de obesidad debido a que 73 por ciento de los adultos y 35 por ciento de niños tienen SPyO, lo que representa que 60.6 millones de mexicanos con este padecimiento.
El gobierno federal ha implementado estrategias para combatir la obesidad y el sobrepeso, entre ellas se encuentra reconocer SPyO como emergencia sanitaria, el impuesto a bebidas azucaradas y alimentos de alto impacto, acciones para activación física, establecer límites en publicidad infantil de alimentos y bebidas, instalar bebederos en escuelas y la creación del Observatorio Mexicano de Enfermedades No Transmisibles; sin embargo, IMCO advirtió que la magnitud del problema requiere mejor implementación de las medidas.
Ante el problema de la obesidad IMCO propone cinco acciones
- Definir a través de presupuesto, la prevención de SPyO: recaudar un porcentaje de impuestos de bebidas azucaras para tratar el sobrepeso y la obesidad.
- Crear el Sistema Nacional contra Obesidad: definirá las políticas adecuadas contra obesidad.
- Fortalecer las acciones en contexto escolar: crear estrategias de capacitación para los educadores.
- Utilizar los criterios y valores de referencia para las políticas: Información sobre los límites de azúcar, grasas y sodio que una persona debe consumir a diario para evitar enfermedades.
- Impulsar acciones para aumentar los niveles de actividad física: generar incentivos para aumentar la infraestructura en este ámbito. (Agencia ID)