Un grupo internacional de astrónomos, estudiando más de 200.000 galaxias, ha medido la energía generada dentro de una enorme zona del espacio con una precisión nunca antes alcanzada. Se trata de la evaluación más completa de la emisión de energía del universo cercano efectuada hasta ahora.
El equipo, que presentó este 10 de agosto sus resultados en la XXIX Asamblea General de la Unión Astronómica Internacional (IAU) en Honolulu (Hawaii, EE UU), confirma que la energía producida actualmente en esa sección del universo es sólo la mitad de lo que era hace dos mil millones de años.
La investigación forma parte del proyecto GAMA, el mayor sondeo conjunto en múltiples longitudes de onda hecho hasta ahora
Además, los investigadores han revelado que esta disminución tiene lugar en todas las longitudes de onda, desde el ultravioleta hasta el infrarrojo lejano. En todas ellas se detecta que el universo se está muriendo lentamente.
El estudio incluye observaciones de muchos de los telescopios más potentes del mundo, como VISTA y VST del Observatorio Europeo Austral (ESO), y otros como SDSS y AAT. También se realizaron observaciones de soporte con dos telescopios espaciales en órbita operados por la NASA (GALEX y WISE) y con Herschel de la Agencia Espacial Europea.
La investigación forma parte del proyecto GAMA (Galaxy And Mass Assembly), el mayor sondeo conjunto en múltiples longitudes de onda hecho hasta ahora. «Utilizamos todas las instalaciones terrestres y espaciales a nuestro alcance para medir la emisión de energía de esas más de 200.000 galaxias en cuantas longitudes de onda nos fue posible», afirma Simon Driver (ICRAR, Universidad de Australia Occidental) que dirige el gran equipo de GAMA.
Los datos del sondeo, dados a conocer hoy a los astrónomos de todo el mundo, incluyen las medidas de la emisión de energía de cada galaxia en 21 longitudes de onda, desde el ultravioleta hasta el infrarrojo lejano. Este conjunto de datos ayudará a los científicos a comprender mejor cómo se forman y evolucionan los diferentes tipos de galaxias.
Fuentes de energía del universo
Toda la energía del universo fue creada en el Big Bang, con parte de la misma en forma de masa. Las estrellas brillan porque transforman su masa de nuevo en energía, tal y como describe la conocida ecuación de Einstein E=mc2. Gran parte de la producción de energía del universo proviene de la fusión nuclear en estrellas, los discos muy calientes que hay alrededor de los agujeros negros y otros núcleos galácticos activos. También hay radiaciones de longitudes de onda mucho más largas que provienen de las enormes nubes de polvo que irradian de nuevo la energía de las estrellas de su interior.
El estudio de GAMA propone modelar y crear un mapa de toda la energía generada dentro de un gran volumen de espacio actualmente y en diferentes momentos en el pasado.
«Mientras que la mayoría de la energía que se encuentra dispersa alrededor del universo surgió después del Big Bang, la energía adicional es generada de manera constante por las estrellas a través de la fusión de elementos como hidrógeno y helio juntos», afirma Simon Driver. «Esta nueva energía es, o bien absorbida por el polvo que viaja por la galaxia anfitriona, o bien escapa hacia el espacio intergaláctico y viaja hasta que choca con algo, como otra estrella, un planeta o, muy ocasionalmente, un espejo de telescopio».
El hecho de que el universo se esté apagando lentamente se conoce desde finales de los 90, pero este trabajo muestra que está ocurriendo en todas las longitudes de onda, desde el ultravioleta al infrarrojo, lo cual representa la evaluación más completa de la emisión de energía del universo cercano.
«De aquí en adelante, el universo irá decayendo, envejeciendo lentamente. Básicamente, el universo se ha sentado en el sofá, se ha tapado con una manta y está a punto de dar una cabezada para echarse una siesta eterna», concluye Simon Driver.
El equipo de investigadores pretende ampliar el trabajo con el fin de obtener un mapa de la producción de energía a lo largo de toda la historia del Universo, utilizando para ellos nuevas instalaciones, como el radiotelescopio más grande del mundo, el Square Kilometre Array, que se construirá en Australia y Sudáfrica durante la próxima década.
(SINC/ESO)