Estudiantes del nivel medio de educación, de México, desarrollaron un bioinsecticida en aerosol que no es agresivo con el medio ambiente y que tiene una efectividad del 99 por ciento para eliminar al mosquito transmisor de enfermedades como el dengue, el zika y la chikunguya.
Los jovenes son alumnos del Centro de Bachillerato Tecnológico, Industrial y de Servicios (CBTIS) 165, «Leona Vicario» en la población de Coatepec, en el estado de Veracruz.
La idea surgió del alumno Erasmo Leonel Pérez Méndez, quien se planteó la necesidad de crear un insecticida ecológico después de que se presentaron dos casos de dengue en ese plantel, que fuera eficaz en eliminar los mosquitos (sobre todo del tipo aedes), pero que además fuera amigable con el medio ambiente, que no tuviese las repercusiones que tienen los insecticidas creados con productos químicos.
«La idea surgió a partir de las investigaciones que realizamos en el club de ciencias ‘Galácticos’, al que pertenecemos y de la curiosidad de dos casos de dengue que se presentaron en la escuela, investigamos y nos dimos cuenta de todas las características que presentan las enfermedades chikungunya y zika, identificamos que no hay un método como tal para combatir el vector, sino los insecticidas comerciales, por lo que decidimos crear una alternativa ecológica y económica», dijo el 1 de junio de 2017, después de ganar el primer lugar en el concurso nacional de prototipos, en la categoría de proyecto tecnológico.
El insecticida está compuesto en un 20 por ciento de pimienta, guanábana y piocha, con lo cual se elimina el 99.7% de los insectos en laboratorio y 99.4% en exterior.
La estudiante Betsabé Ivonne Miramontes Rivas, quien también participa en el proyecto, refirió que les había «inquietado» «saber que este mosquito había afectado no sólo nuestra comunidad, sino nuestro estado, nuestro país; entonces decidimos investigar más acerca de él y como darle solución a esta problemática social, porque es una crisis sanitaria, que realmente está afectando a toda nuestra sociedad y es así como surge este proyecto».
Además del insecticida también fabricaron el gel repelente, que al igual que el bioinsecticida tiene un alto grado de eficiencia y no causa ningún efecto secundario al ser humano.
En este año, elaboraron cerca de 400 dosis de bioinsecticida en aerosol, las cuales pusieron a la venta al público con un bajo costo, incluso inferior a los de los productos comerciales, para dejar una pequeña ganancia para financiar los experimentos de los laboratorios del plantel y otra para los trabajos de proyectos de jóvenes del Club de Ciencias.
Manuel Guevara Huerta, tutor de los alumnos que desarrollaron el bioinsectida, informó que cada dosis consta de medio litro, que se convierte en dos litros y medio y con el que se puede fumigar una casa media hasta dos veces.
En febrero de 2018 participaron en la internacional Science Fair 2018, la Feria Mundial de Ciencia en dondeobtuvieron el primer lugar en la categoría medio ambiente y la medalla de bronce como uno de los 25 mejores proyectos del mundo
También fue reconocido el trabajo como asesor de Manuel Guevara Huerta.