Un estudio publicado en Climatic Change pone de manifiesto que los núcleos de población de las regiones altas y frías del este de África podrían ser más vulnerables a la malaria de que lo se pensaba, mientras que los de las tierras bajas y cálidas podrían ser menos vulnerables. Son los resultados de un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Penn State y del centro de investigación de ISGlobal, CRESIB, que han aplicado una técnica estadística a modelos climáticos convencionales de gran escala para mejorar la predicción de las tendencias de la malaria a nivel local.
‘»Las predicciones de malaria que se realizan a partir de la simulación de modelos climáticos globales no indican, necesariamente, lo que va a ocurrir en un lugar determinado. Lo que es probable que suceda en un lugar puede ser muy diferente a lo que ocurra en otro punto que esté a solo 50 kilómetros. Por ello, para entender el impacto real que puede tener el cambio climático en la transmisión de la malaria, debemos utilizar métodos más precisos'», explicó Matthew Thomas, investigador de la Universidad de Penn State y coordinador del estudio.
La capacidad de los mosquitos para transmitir la malaria está fuertemente influenciada por la temperatura ambiental. “Los mosquitos de la malaria son organismos ectotérmicos. Esto significa que su temperatura corporal coincide con la temperatura de su entorno inmediato”, destaca Krijn Paaijmans, primer autor del estudio e investigador de ISGlobal.
Mosquitos calientes
Los científicos examinaron cómo los cambios en la temperatura debido a un futuro calentamiento climático podrían afectar al potencial de los mosquitos para transmitir la malaria en cuatro localizaciones de Kenia con características ambientales diferentes. El equipo utilizó una técnica estadística que reduce la escala de las proyecciones de modelos climáticos globales convencionales para generar datos de temperatura diarios de alta calidad.
Luego, usando un modelo matemático sencillo que describe la influencia de la temperatura en la capacidad de los mosquitos adultos para transmitir parásitos de la malaria, compararon las predicciones obtenidas en las cuatro localizaciones diferentes con las predicciones de las simulaciones del modelo a gran escala.
Los resultados obtenidos por el modelo a escala reducida predicen grandes incrementos del potencial de transmisión de la malaria en las tierras altas y frías, así como una reducción de la transmisión en regiones con un clima cálido, similar al de la sabana. “Las predicciones más precisas del riesgo de malaria se adaptarán mejor a las necesidades de las comunidades locales y mejorarán las estrategias de adaptación y mitigación a escala local”, concluye Paaijmans.
Referencia bibliográfica:
KP Paaijmans, JI Blanford, RG Crane, ME Mann, L Ning, KV Schreiber & MB Thomas. Downscaling reveals diverse effects of anthropogenic climate warming on the potential for local environments to support malaria transmission. Climatic Change, 2014, in press, DOI 10.1007/s10584-014-1172-6