Científicos del Departamento de Investigación en Alimentos (DIA), en la Facultad de Ciencias Químicas (FCQ) de la Universidad Autónoma de Coahuila (Uadec), extraen prebióticos con diversas propiedades benéficas para la salud a partir del aguamiel de Agave salmiana y Agave atrovirens.
“La investigación consistió en la búsqueda o extracción de oligosacáridos que tengan potencial prebiótico, a partir de dos tipos de agaves que crecen de forma natural en el desierto, como son el Agave salmiana y Agave atrovirens”, detalló la doctora Adriana Carolina Flores Gallegos, profesora investigadora del DIA de la Facultad de Ciencias Químicas de la Uadec.
El proyecto inició con la caracterización de subproductos del Agave salmiana y Agave atrovirens (también conocidos como agave verde y agave cenizo, respectivamente), dos de las principales especies de la región semidesértica de Coahuila. La importancia de la investigación radica en la poca cantidad de estudios sobre el tema, lo cual limita las opciones de su empleo para fines alimentarios, nutracéuticos o medicinales. Además, se ha reportado que subproductos como el aguamiel y pulque obtenidos de diferentes especies de agaves difieren en su composición química.
“En la región tenemos la presencia de una gran cantidad de especies de agave; sin embargo, no se estudia muy a fondo si la composición o los prebióticos presentes en cada uno de los diferentes agaves es distinto, nosotros hemos estado trabajando en un estudio comparativo entre estas dos especies de agave”, detalló la doctora Flores Gallegos.
Como parte de la caracterización de los subproductos de ambos tipos de agave, se realizó una evaluación de la capacidad prebiótica de sus mieles empleando cultivos puros de los probióticos Lactobacillus acidophilus, Bifidobacterium bifidum 450B y Bifidobacterium longum.
“Estamos tratando de caracterizar cada tipo de agave, dado que los estudios que hay hasta ahora hablan de los agaves en forma general, pero no de manera específica, esto es muy importante ya que algunos tienen mayor presencia de azúcares que otros y podrían ser más benéficos para la salud”, explicó Adriana Elizabeth Ortega Flores, colaboradora del proyecto y estudiante del séptimo semestre de la licenciatura de médico general de la Universidad Autónoma de Zacatecas.
Los resultados de la investigación demostraron que las mieles de los agaves evaluados poseen un perfil de carbohidratos distinto, en donde el agave cenizo tuvo una mayor cantidad de oligosacáridos y fructanos. Sin embargo, ambas mieles lograron promover el crecimiento de cepas probióticas por mayor tiempo en comparación con la glucosa.
El proyecto concluye de forma preliminar debido al tipo de enlaces presentes en los oligosacáridos y fructanos de agave obtenidos, estos podrían ser utilizados como endulzantes y fuente de prebióticos capaces de promover el crecimiento de bifidobacterias en el intestino. No obstante, es necesaria la caracterización de cada uno de los oligosacáridos y fructanos presentes en cada uno de los agaves.
“Sigue hacer pruebas preclínicas para sustentar el beneficio que este producto puede tener en los humanos. Hasta ahora con pruebas in vitro hemos observado que efectivamente promueve y prolonga el crecimiento de las principales bacterias ácido lácticas que habitan en el intestino, prolongan y permiten que se produzcan los ácidos grasos de cadena corta que aportan un beneficio adicional a la salud del consumidor”, puntualizó la doctora Flores Gallegos.
Respecto al futuro de la investigación, la colaboradora Ortega Flores agregó: “Se busca incorporar este producto a un alimento o crear algún endulzante que pueda sustituir a otros que ya se utilizan y son de poco valor nutricional o incluso perjudican la salud”.
En cuanto a importancia social, este proyecto representa una posibilidad de dar un valor agregado a los subproductos del agave para el beneficio de la gente que trabaja con esta planta, principalmente en zonas rurales, finalizó Ortega Flores.
Dra. Adriana Carolina Flores Gallegos 01 (844) 416 1238 y 416 9213 |