La población en general y específicamente los jóvenes que estudian alguna carrera relacionada con los alimentos, deben poner más atención en el contenido de los mismos, la cantidad de los ingredientes y los certificados de calidad, recomendó Marco Antonio León Félix durante el Primer Congreso de Ciencia y Tecnología de los Alimentos, organizado por la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad Veracruzana (UV).
El académico de la Universidad Nacional Autónoma de México destacó la necesidad de que los consumidores exijan productos alimenticios de calidad, y más si son estudiantes que en unos años tendrán responsabilidades en la industria.
Ante alumnos de diferentes programas educativos reunidos en el auditorio de la Unidad de Humanidades, León Félix, presidente de la Sociedad Mexicana de Inocuidad y Calidad para Consumidores de Alimentos, dijo que este organismo pretende que se regrese a las ideas básicas de los productos, que se fijen y no se dejen llevar por la mercadotecnia.
No se trata, dijo, de hacer ecuaciones, balances de masas, sino verificar qué contiene lo que ingerimos y conocer qué sellos de calidad existen para garantizar que, por ejemplo, la carne que se consume no tiene clembuterol o que las frutas y verduras están libres de pesticidas. Llamó a que la población también sea consciente de que todas las empresas de alimentos están expuestas a riesgos como incluir restos de animales en sus productos.
El especialista en congelación de alimentos comentó que la alimentación también tiene que ver con aspectos emocionales, pues cuestiones como el estrés impiden que se aprovechen los alimentos de igual forma. Sobre la llamada “comida chatarra” dijo que es un error llamarla así y “satanizarla”, pues lo que afecta al organismo es combinarla mal y comerla en proporciones inadecuadas.
Como parte de las actividades del congreso, Biulah Rodríguez Muñoz, perito en toxicidad de alimentos, habló sobre el consumo de los alimentos con los cinco sentidos. Para tener buena aceptación, los alimentos deben tener buen aspecto, sabor agradable, textura y temperatura características del producto y producir ciertos sonidos como en el caso de las botanas.
Habló de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 051 que marca la pauta a seguir para realizar el etiquetado de los alimentos. Indicó que los ingredientes se deben declarar en la etiqueta con letra legible y según la cantidad (de mayor a menor); por ejemplo, en un jugo es primero el agua, luego el azúcar, el ácido cítrico y al final casi siempre los saborizantes y los olorantes.
Comentó que existe controversia para clasificar saborizantes y aditivos que mejoran la estabilidad de los alimentos. Los saborizantes son para agradar el paladar, se incluyen en cantidades menores y son auto-limitativos, lo que significa que a la persona le puede agradar o no. En el caso de los aditivos, éstos deben existir en la naturaleza, como los antioxidantes en el plátano, en la papa o en aceites.