Quién le iba a decir a James D. Watson y Francis Crick en 1953 que su descubrimiento sobre la doble hélice del ADN, basado en el trabajo de Rosalind Franklin y galardonado con el premio Nobel, sería actualizado 60 años después.
El 20 de enero de 2013 un grupo de científicos de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), publicó en la revista Nature Chemistry, el trabajo donde rdemuestra que las estructuras de cuatro hebras «cuádruple hélice» del ADN –conocido como G-quadruplex– existen igualmente en el genoma humano.
«Han pasado 60 años desde que se resolviera su estructura, pero un estudio como este nos muestra que la historia del ADN continúa», explica Julie Sharp, experta del centro de investigación del cáncer de Reino Unido.
El 25 de abril de 1953 la revista científica Nature publicó la investigación «Estructura del ácido desoxiribonucleico», en la que Watson y Crick revelaron el misterio de la molécula que contiene la información necesaria para que cualquier organismo vivo nazca y se desarrolle, resolviendo el funcionamiento del código genético iniciando una era de avances sin precedentes en la biología.
Con las 4 hélices, dichas estructuras se forman en regiones de ADN ricas en guanina, una de las cinco bases nitrogenadas que forma parte del ADN y el ARN, por lo general abreviado como «G».
El hallazgo marca la culminación de más de 10 años de investigación tratando de demostrar estas estructuras complejas en células humanas vivas, trabajando con lo hipotético, a través de modelos computacionales, experimentos de laboratorio y, finalmente, la identificación de las células cancerosas humanas utilizando biomarcadores fluorescentes.
Un nuevo paradigma a investigar
El trabajo revela una clara relación entre las concentraciones de cadenas cuádruples y el proceso de replicación del ADN, esencial para la división celular y la producción.
«Estas complejas estructuras suelen darse con mayor probabilidad en los genes de las células que se dividen rápidamente, como las células cancerosas”, apunta Shankar Balasubramanian uno de los autores de la Universidad de Cambridge. “Para nosotros, se trata de un nuevo paradigma a investigar, usando estas cadenas cuádruples como dianas para tratamientos personalizados en el futuro».
«La estructura de la ‘cuádruple hélice’ del ADN podría ser la clave para nuevas formas de inhibir selectivamente la proliferación de células cancerosas. De hecho, la confirmación de su existencia en las células humanas es un hito real», concluye.
Referencia bibliográfica:
Giulia Biffi, David Tannahill, John McCafferty & Shankar Balasubramanian. “Quantitative visualization of DNA G-quadruplex structures in human cells”. Nature Chemistry, 20 de enero de 2013.