La desigualdad de género destaca entre una amplia lista de graves problemas que afronta la Humanidad, porque afecta directamente a la mitad de los seres humanos, expuso el doctor en Ciencias Económicas y Ciencias Administrativas Bernardo Kliksberg, catedrático de la Universidad de Buenos Aires.
El asesor internacional, científico social y pionero de la ética para el desarrollo, el capital social y la responsabilidad empresarial, aseveró que pese a los avances registrados en la búsqueda de equidad de derechos económicos, sociales y políticos, persisten profundas desigualdades, y prevalece la violencia.
Durante el II Ciclo de Conferencias ¿Hacia dónde va el mundo?, en la cátedra que lleva su nombre, realizado en la Rectoría General de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), indicó que en la actualidad una de cada tres mujeres es objeto de algún tipo de agresión, de acuerdo con los reportes de los organismos internacionales vinculados a la Organización de las Naciones Unidas que se ocupan de los temas de la mujer.
La cifra para América Latina asciende a 40 por ciento, debido a que nuestras sociedades son severamente machistas y “lamentablemente la violencia contra ese sector de la población es amplia, significativa, diversificada e incluye diversas formas de expresión que van de la agresión física a la psicológica, siendo el feminicidio la más brutal, sólo porque la mujer decidió no ser más una posesión del marido que la maltrataba”.
El doctor Honoris Causa por la UAM reveló que el Foro de Davos solicitó un informe sobre la situación de la mujer en el ámbito laboral, el resultado del reporte 2016 indicó que perciben 25 por ciento menos de salario que el hombre, en relación con un trabajo de igual responsabilidad, esto a nivel internacional, lo cual llevará un siglo igualarlo.
El doctor Kliksberg señaló que la emancipación femenina ha sido relativa, pese a su incorporación masiva al mercado del trabajo y de la educación, porque su trabajo en el hogar no es reconocido, pese a su relevancia, significado y valor económico para la sociedad y la economía de las naciones.
El economista y sociólogo convocó a asumir un compromiso moral de valores éticos en todos los ámbitos de la vida, así como en la economía, la política, la gestión pública y empresarial, el desarrollo de la tecnología y las ciencias, el medio ambiente, entre otros, para revertir problemas como la desigualdad, la pobreza, la discriminación, la devastación ambiental, la violencia y la intolerancia.
El doctor Salvador Vega y León, rector general de la UAM, afirmó que esta casa de estudios, mediante muchos esfuerzos de gestión, realizados desde la Rectoría General y las Unidades Académicas, se ocupa por ofrecer a sus alumnos una serie de elementos que, más allá de su instrucción profesional, abona a su formación integral.
“En ese espectro se inscribe el impulso a procesos fundamentales para la universidad contemporánea, como la movilidad, el intercambio académico, el emprendimiento, los procesos de educación virtual y a distancia, pero también, el diálogo directo que, desde la multidisciplina, invita a reenfocar la realidad que vivimos”, añadió.
El doctor Vega y León manifestó que los jóvenes en formación son libres en su pensamiento, dinámicos en sus propuestas y receptivos con aquellos enfoques que los retroalimentan, lo que los configura en agentes fundamentales para que, como sociedad, se avance en la adopción de conductas de beneficio colectivo.