La formación de deslizamientos en la carretera de cuota Tijuana-Ensena como el ocurrido el pasado 28 de diciembre, se debe a fallas geológicas de gran longitud y unidades de roca con propiedades físicas inclinadas, así lo establece un estudio del Centro de Investigación Científica y de Educación Superior de Ensenada (CICESE).
Una condición necesaria para que el deslizamiento se produzca es que exista una pendiente pronunciada que favorezca el movimiento de la tierra que se encuentra en desequilibrio, también existen agentes “disparadores” naturales del movimiento, como los sismos y la saturación de agua en los poros de los sedimentos.
CICESE ha documentado en trabajos técnicos realizados desde que se construyó la carretera Tijuana-Ensenada en su tramo de Salsipuedes, donde la zona se caracteriza por la existencia de deslizamientos rotacionales dominados por la acción de la gravedad.
También existen “disparadores” antrópicos que son los relacionados con la acción humana, como el corte de las pendientes o la carga excesiva de obras civiles. O bien, cuando ocurre la combinación de vibración (como el producido por el movimiento de vehículos pesados), saturación por agua (principalmente pluvial), inclinación de capas en el sentido de la pendiente, el movimiento provoca ruptura y desequilibrio.
El tiempo juega también un papel importante, pues las condiciones en terrenos susceptibles se modifican por el movimiento gradual a lo largo de planos de fracturas y por compactación del terreno.
Con respecto a la zona del kilómetro 93, donde ocurrió el hundimiento de la carretera en diciembre pasado, los estudios señalan que ahí convergen dos “deslizamientos” a lo largo de la costa. A través de imágenes satelitales de alta resolución se interpreta también que los deslizamientos están contenidos en estructuras mayores.
Los especialistas Manuel Cruz-Castillo y Luis Delgado-Argote, observaron que en la zona existen fallas geológica localizadas cerca de Salsipuedes, que son Descanso-Estero y Tres Hermanos, ambas estructuras se localizan a 10 kilómetros de la costa de Ensenada.
En un recorrido de reconocimiento geológico efectuado antes del colapso de la carretera, personal de la División de Ciencias de la Tierra del CICESE observó que el hundimiento en el área donde la carpeta asfáltica estaba más afectada obedece principalmente al movimiento paralelo a las capas en sentido de la pendiente principal.
Cabe señalar que hace algunos meses fue aceptado un proyecto de investigación con fondos de la Agencia Espacial Europea (ESA) para estudiar la zona de Salsipuedes. Este proyecto aplicará técnicas de interferometría (con las cuales se combina la luz proveniente de diferentes receptores para obtener imágenes de mayor resolución) para identificar rasgos estructurales, como fallas y hundimientos relacionados con los deslizamientos rotacionales.
El proyecto también combinará técnicas geológicas, sismológicas de sitio y geofísicas, que permitirán evaluar el comportamiento del terreno en aquellos sitios donde se han identificado rasgos de inestabilidad como ruptura y deslizamientos en sentido vertical y horizontal.
Resulta importante indicar que el diseño de la autopista obedece a las proyecciones hechas a finales de la década de los sesenta, cuando el aforo vehicular era menor que el actual, en particular el peso de los autos que circulaban era bajo, en cambio en años recientes circulan tráileres como el atrapado en la zona de deslizamiento, que fue de doble remolque donde se transportaba cemento y cuyo peso superaba las 35 toneladas.