El 18 de enero del 2004, se difunde que un grupo arqueológico francés recuperó del fondo del Mediterráneo, fuera de la costa norte de Egipto, más de 1.000 artefactos de bronce, incluyendo estatuas y bustos de las divinidades faraónicas Anubis, Isis y Bastet, además de un conjunto de cántaros, vasijas y utensilios usados en ritos religiosos, la mayor parte elaborados en bronce.
Los artefactos hallados en investigaciones arqueológicas datan de los siglos 3 a 5 Antes de Cristo y también incluyen herramientas y envases usados en rituales religiosos.
«El item más impactante y hermoso es un busto de diorita de una persona no identificada con pelo largo, que algunos creen podría ser el Dios Nilo, Hapy» dijo Zahi Hawass, jefe del Consejo Supremo de Antigüedades, de Egipto.
La presunción es que el grupo francés que trabajaba en la bahía de Abu Qir encontró las ruinas de hace 2.000 años del palacio de Cleopatra y el buque principal de la flota de Napoleón, el L´Oriente, que se hundió el 1º de Agosto de 1798 en una batalla contra la flota británica dirigida por el Almirante Nelson.
Zahy Hawas manifestó que las piezas fueron halladas junto a los vestigios del templo de Hércules, en las ruinas de Heraclion.
Esta ciudad y la de Menutis fueron construidas en los últimos tiempos de los faraones y se hundieron bajo las aguas tras un terremoto en el siglo VII u VIII.
Ambas localidades, cercanas al pueblo de Canopo, en la desembocadura del Nilo, figuran en la mitología griega y en obras clásicas como las de Herodoto, quien visitó Egipto en el año 450 antes de Cristo, y mencionó, por ejemplo, el templo dedicado a Hércules.