El 26 de marzo de 1874 en Buenos Aires, Argentina, se fundó la actual Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales para impulsar el adelanto, desarrollo y difusión de las ciencias exactas, físicas y naturales y de sus tecnologías.
Su origen está en los miembros fundadores elevados al rango de académicos, los de la Facultad de Ciencias Matemáticas y los de la Facultad de Ciencias Físiconaturales, siguió con todas las vicisitudes de reorganización académica y las que sobrevinieron en 1881 y en 1906.
El 3 de febrero de 1925 adquirió su autonomía como institución civil autónoma. Bajo su jurisdicción tiene al Instituto de Botánica Darwinion. Han pertenecido a ella los científicos más destacados de la Argentina, incluido los Premio Nobel Bernardo Alberto Houssay y Luis Federico Leloir y entre los extranjeros el biólogo español Severo Ochoa y el físico alemán Albert Einstein.