Un estudio realizado por el Royal Botanic Gardens, en Reino Unido, en colaboración con científicos etíopes reportó que el cambio climático podría afectar la producción del café arábica (Coffea arabica), a tal punto que estará extinto antes de terminar este siglo.

El café arábica es nativo de Etiopía, es la especie más usada en la industria del café y crece en las plantaciones del mundo pero tiene poca variabilidad genética, lo que la hace poco flexible al cambio climático y otras amenazas como pestes y enfermedades, así que debido a la sensibilidad confirmada del café arábica se está haciendo mella en la industria y en la sobrevivencia de la especie.

Esto es muy preocupante para los amantes de una de las bebidas favoritas a nivel mundial y la conclusión proviene de un estudio extensivo, publicado en la revista PLoS ONE de este mes.

Los dos principales tipos de análisis realizados por los investigadores fueron en dos niveles, local y por área extensiva. En el análisis local, el resultado más favorable es que la reducción será de 65 por ciento en las localidades bioclimáticamente adecuadas, y la peor lectura es que se perderá el 99.7 por ciento de las especie para el 2080. Los resultados del análisis por área extensiva son más alentadores, ya que para el mismo año, en localidades bioclimáticamente adecuadas se perdería, si todo sale bien, el 38 por ciento, contra el peor pronóstico de 100 por ciento de pérdida en malas condiciones.

Al hablar de adecuación bioclimática se refiere a la combinación de variabilidad climática necesaria para la buena salud y sobrevivencia de las especies, por lo que la pérdida de buenas condiciones climáticas pone en riesgo a las poblaciones naturales de un área, provocando lo que se conoce como estrés ambiental, lo cual puede llevar a la extinción.

El resultado del cambio climático en Etiopía para el café arábica, el único que se cultiva en el país, también es profundamente negativo, ya que las poblaciones naturales de bosques de café (semi-domesticados) y plantaciones se producen en la misma área general bioclimática que las plantas endémicas y salvajes de arábica. Esto quiere decir que aunque la planta crece libremente por la zona, la necesidad de crear plantaciones deforesta las zonas silvestres, dónde habita la planta original.

Las investigaciones tratan de llamar la atención sobre este tema y los investigadores esperan que los resultados ayuden a planear estrategias para la sobrevivencia del café arábica en estado silvestre. El estudio identificó sitio claves en los que se podría sostener la población de este cafeto, sitios que podría servir a largo plazo como santuarios, aunque es claro que el cambio climático seguirá afectando a la especie. La investigación también identificó a las poblaciones que requieren atención inmediata, lo cual incluye instalar bancos de semillas y colecciones de especímenes vivos.

 

Referencias:

Aaron P. Davis, Tadesse Woldemariam Gole, Susana Baena, Justin Moat. “The impact of climate change on indigenous arabica coffee (Coffea arabica): predicting future trends and identifying priorities”. PLoS ONE.

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