La Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN) ha celebrado este lunes los 60 años de su fundación. Al aniversario han acudido delegaciones oficiales de 35 países. Fundado en 1954, el CERN es hoy el mayor laboratorio de física de partículas del mundo y un buen ejemplo de colaboración internacional, reuniendo a científicos de 100 nacionalidades.
Los orígenes del CERN se remontan al final de los años 40. Tras la Segunda Guerra Mundial, un pequeño grupo de científicos con visión de futuro y de administradores públicos de ambos lados del Atlántico identificaron la investigación fundamental como un modo potencial de reconstruir el continente y fortalecer la paz en una región con problemas. De esta idea nació el CERN, con el doble objetivo de realizar ciencia de excelencia y de unir a las naciones. Según sus miembros, este proyecto de colaboración ha funcionado muy bien durante este tiempo y se ha expandido a todos los continentes.
\’Durante estas seis décadas, el CERN ha sido siempre un lugar donde la gente podía trabajar junta independientemente de su cultura y nacionalidad. Formamos un puente entre las culturas hablando una sola lengua universal, y ese lenguaje es la ciencia\’, dijo el director general del CERN, Rolf Heuer.
El 29 de septiembre de 1954 el CERN se constituyó a través de la firma de los primeros 12 Estados miembros. Con los años y su éxito continuado, el CERN ha atraído a nuevos países, convirtiéndose en una organización verdaderamente global. Hoy día cuenta con 21 estados miembros, entre ellos España, y más de 10.000 usuarios en todo el mundo. Hay además varios países que han presentado su solicitud para acceder. \’Con el tiempo, el CERN se ha convertido en el laboratorio del mundo líder en física de partículas, siempre orientado hacia la excelencia\’, dijo la Presidenta del Consejo del CERN, Agnieszka Zalewska.
España en el CERN
España es miembro del CERN desde 1983. Es el quinto contribuyente por detrás de Alemania, Francia, Reino Unido e Italia, con una cuota del 8,28% en 2014. Además de esta contribución fija, se aportan otros fondos para financiar la actividad de los grupos de investigación españoles que participan en los experimentos del CERN, entre ellos los del Gran Colisionador de Hadrones o LHC y otros como ISOLDE o nTOF.
España tiene más de un centenar de trabajadores en la plantilla del CERN, a los que se suman 354 usuarios y otros colaboradores. En total, el número de científicos y técnicos españoles en el mayor laboratorio de física de partículas del mundo sobrepasa las 500 personas. Más de 70 empresas españolas participaron en la construcción y mantenimiento del LHC, obteniendo contratos por 252 millones de euros entre 1998 y 2012, y adquiriendo de esta manera la experiencia necesaria para trabajar en otras instalaciones científicas internacionales como ITER, XFEL o el Observatorio Europeo Austral (ESO).
Unos 200 investigadores, ingenieros y técnicos españoles participan en el LHC y sus experimentos a través de diez centros de investigación. España contribuye con algo más del 4% de los recursos de la red de computación global distribuida (Grid), que almacena y distribuye los datos del LHC. La participación de los grupos de investigación españoles en el LHC cuenta con el apoyo de la Secretaría de Estado de I+D+I del Ministerio de Economía y Competitividad a través del Programa Nacional de Física de Partículas, y del Centro Nacional de Física de Partículas, Astropartículas y Nuclear (CPAN), proyecto Consolider‐Ingenio 2010 gestionado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
Funcionamiento del CERN
El CERN se dedica a la física fundamental dirigida a descubrir de qué está hecho el Universo y cómo funciona. Desde 1954, el panorama de la física fundamental ha cambiado drásticamente. Entonces, el conocimiento de la materia a las escalas más pequeñas estaba limitado al núcleo del átomo. En 60 años, los físicos de partículas han avanzado en el conocimiento de las fuerzas y la materia a las escalas más pequeñas, desarrollando una teoría basada en este conocimiento, el Modelo Estándar de Física de Partículas, y mejorando el conocimiento del Universo y de sus comienzos.
Durante estos años, los físicos que trabajaban en el CERN han contribuido a este proceso a medida que una serie de aceleradores cada vez más grandes y potentes ha permitido a los investigadores explorar nuevas fronteras energéticas. Entre los resultados obtenidos, algunos descubrimientos han mejorado enormemente la comprensión de las leyes fundamentales de la naturaleza y desarrollado tecnologías de vanguardia.
Se incluyen el descubrimiento de las partículas portadoras de la fuerza débil, merecedor del Premio Nobel para Carlo Rubbia y Simon van der Meer en 1984; la creación de la World Wide Web por Tim Berners-Lee en 1989; el desarrollo de un revolucionario detector de partículas por Georges Charpak, galardonado con el Premio Nobel en 1992; y el descubrimiento del bosón de Higgs en 2012, que prueba la existencia del mecanismo de Brout-Englert-Higgs y llevó al Premio Nobel a Peter Higgs y François Englert en 2013.
El CERN opera el principal acelerador de partículas del mundo, el Gran Colisionador de Hadrones (LHC). Con su reinicio el año que viene a un nuevo récord de energía, el CERN continuará buscando respuestas a algunas de las preguntas fundamentales sobre el Universo.