El documento impreso más antiguo conocido, no es la Biblia
En China, Wang Jie imprimió el más antiguo conocido y que se conserva: el Sutra del diamante.
Fue reencontrado a principios de siglo XX por el orientalista Sir Marc Aurel Stein (1862-1943), en una cueva en el noroeste de China, como parte de una biblioteca escondida allí alrededor del año 1000 d.c.
La primer noticia de su descubrimiento apunta que previamente lo descubrió el monje chino budista Wang Yuanlu, quien estaba limpiando la arena de una cueva de meditación y observó una grieta en la pared que sugería un portal.
El pergamino fue intencionalmente ocultado –de manera similar los tibetanos ocultaron textos-tesoro o “gtermas” en cuevas, los cuales tradicionalmente eran guardados celosamente por deidades oníricas conocidas como Dankinis.
A Wang Yuanlu le ordenaron devolverlo y cerrar la cámara donde estuvo 1000 años, preservado perfectamente en la oscuridad.
En 1907 el explorador Aurel Stein llegó en búsqueda de la Cueva de los Mil Budas, siguiendo la pista del legendario monje Xuanzang, quien en el siglo 7 había viajado a la India en búsqueda de antiguos manuscritos. Curiosamente el monje Wang Yuanlu también era seguidor de Xuanzang. Esa coincidencia empática probablemente propicio que Stein obtuviera acceso a la cueva, donde entre unos 5 mil pergaminos encontró el Sutra del Diamante.
Stein llevó los documentos a India y luego a Londres. En su momento el Sutra del Diamante fue exhibido a un lado de una Biblia impresa por Gutenberg en el British Museum, pero actualmente, debido a su fragilidad, se encuentra resguardado fuera del escrutinio público.
El Sutra del Diamante consiste en un papel pergamino gris de madera de casi 5 metros de largo impreso con caracteres chinos y enrollado en un cilindro de madera, cientos de años antes de la invención de la imprenta en Europa, cerca de 1450, por Johannes Gutenberg.
El Sutra del Diamante es el documento más antiguo con una fecha claramente indicada, la cual está impresa al final del texto, por eso su precisión: 11 de mayo del año 868. El pergamino lo dedicó Wong Jei a sus padres, en acto que se piensa era parte de una costumbre de la época, de dedicar las copias de los impresos a las personas que se quería honrar.
El Sutra del Diamante se puede constituir en un pequeño libro, que puede ser recitado en 40 minutos, contiene paradojas como “Lo que se conoce como la enseñanza del Buda no es la enseñanza del Buda'», y evoca pinceladas del pensamiento zen. Se dice que quien logre practicar por lo menos 4 líneas de este texto recibirá las bendiciones del cielo y la luz diamantina del Vacío Radiante.