Galileo Galilei (1564-1642) es uno de los científicos más célebre del siglo XVII y de nuestros tiempos, dentro de las atribuciones que se le hacen, está la invención del termómetro de Galileo, sin embargo, recientes investigaciones han demostrado que este artefacto no fue inventado por el italiano, sino por un grupo de investigación florentino.
En el artículo publicado en el journal of Chemical Education, Peter Loyson explica que el crédito de esta invención fue atribuido recientemente a la Accademia del Cimento de Florencia, o Academia Florentina del Cimento (1657-1667), fundada por el duque Ferdinand II de Toscana y su hermano Leopoldo. La Academia fue un grupo científico de académicos y técnicos que se organizaron con la sola intensión de realizar experimentos científicos. Durante sus 10 años de existencia desarrollaron numerosas formas de termómetros, hidrómetros y llevaron a cabo investigaciones en múltiples tópicos científicos.
El termómetro desarrollado por el duque Ferdinand utilizaba esferas de cristal en etanol, las cuales subían y bajaban de acuerdo a la temperatura del ambiente y según la densidad de cada esfera, su construcción está descrita en un documento publicado por la Academia en 1667, años después de la muerte de Galileo.
El Museo de Galileo, del Instituto y Museo de Historia de la Ciencia en Florencia, Italia, tiene una exposición de varias formas de los “termómetros de Galileo”, los cuales, ahora se sabe, fueron diseñados por el duque Ferdinand, su hermano Leopoldo y algunos colaboradores, Francesco Folli da Poppi, Vincenzo Viviani, y Benedetto Castelli.
Aunque Galileo no inventó el “termómetro de Galileo”, sí inventó otro dispositivo llamado termoscopio, también llamado termómetro de aire, que es completamente diferente al que ahora se atribuye a la Academia Florentina de Cimento, al que debería cambiársele el nombre a termómetro florentino.
Para más información, ver el artículo “Galilean Thermometer Not So Galilean” de Peter Loyson en línea: http://pubs.acs.org/doi/pdf/10.1021/ed200793g.