El proceso utiliza una membrana selectiva que sólo deja pasar las moléculas de líquido y retiene 99.9 por ciento de los contaminantes. Reduce en 50% el uso de energía.
La demanda de agua potable se duplicará en los próximos 15 años y se intensificará la escasez del recurso en regiones áridas del mundo, por ello algunos países trabajan en la desalación de agua de mar como alternativa que genere líquido potable, sin embargo, los costos de energía son altos y se invierten cientos de miles de barriles de petróleo en el proceso.
El mexicano Rodrigo Valladares Linares, doctor en biotecnología e investigador de la Universidad de Ciencia y Tecnología Rey Abdalá (KAUST) de Arabia Saudita, trabaja en un método de desalinización de agua de mar y tratamiento de aguas residuales que genere líquido potable y puede usarse en la industria y agricultura, incluso en el consumo humano. Además tiene 50 por ciento de reducción en costos de energía.
Desde hace cinco años el connacional que reside en Arabia Saudita platica que el “método combina el tratamiento de agua residual y la desalación de agua de mar. “Se utiliza un proceso de ósmosis directa (OD o FO por sus siglas en inglés) el cual consiste en una separación por membrana que actúa de forma selectiva, sólo deja pasar las moléculas de líquido y retiene 99.9 por ciento de los contaminantes como carbón, hidrocarburos y metales pesados, lo que hace a la técnica de potabilización de bajo costo. El líquido procesado después se utilizarse en el consumo humano, riego y proceso industrial”.
El investigador señala que en Arabia Saudita más del 60 por ciento del agua potable proviene de desalinización y se obtiene de procesos que utilizan quema de hidrocarburos. Por ello, su investigación toma relevancia porque al estar basado en el proceso de ósmosis tiene una reducción de energía de 50 por ciento y en los costos de mantenimiento, operación y construcción puede disminuirse entre 15 y 20 por ciento en el precio total del proyecto. Además podría ajustarse para no utilizar combustibles fósiles e implementar energía solar.
El método de desalinización y tratamiento de aguas residuales de doctor Valladares Linares puede implementarse para obtener minerales que sirvan en el uso de abono y obtención de metano que genere biogás. Para conseguir este tipo de energía se necesitan métodos que reduzcan la cantidad de agua hasta dejar únicamente los sólidos y extraer de ellos los minerales o implementar un reactor anaeróbico en el que se produzca biogás.
Por el momento, el proyecto se encuentra en fase piloto, con la patente en trámite y el objetivo es llevarlo a la industria. Actualmente se trabaja con empresas de gobierno en Arabia Saudita y distintas universidades en Holanda, Australia y Estados Unidos.
La iniciativa está enfocada en la reutilización de agua en la industria, pero también purifica la sustancia para consumo humano. “A pesar de la buena calidad, la sociedad no ha aceptado los modelos de reutilización directa del líquido residual para beber. Se necesitan convencer a la sociedad y realizar labor educativa”, añade el investigador.
Señala que el equipo del Centro de Investigación de Desalación para agua de mar busca implementar dos estrategias con el objetivo de que la gente se interese: enfocarse en proyectos exitosos a nivel mundial y fortalecer la educación en el ámbito. “No juzgar el agua por el lugar de donde proviene, sino por la calidad, en la que hemos comprobado que superamos la del grifo”.
El mexicano comenta que adaptarse a un país con una cultura diferente le ha costado tiempo. “Cambia la manera de pensar y percibir las cosas, tanto en el ámbito laboral como personal.
Egresado de la Universidad Iberoamericana, Valladares Linares espera contribuir con México, mantiene pláticas con el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua para implementar su proyecto y fortalecer los lazos.
Rodrigo Valladares Linares también es un emprendedor, en colaboración con dos socios creó Sinacqua, empresa mexicana ubicada en el Distrito Federal dedica a la producción y comercialización de artículos de limpieza orgánicos y biodegradables que no utilizan agua.
Los productos sirven para limpiar cualquier tipo de superficies, como tapicería, piso, cocinas industriales y automóviles. En lugar de utilizar un litro de agua para lavar un piso sólo se necesitan cien mililitros. Cuenta con distribuidores en Cuernavaca, Puerto Vallarta y Querétaro.
(Agencia ID)