Científicos e investigadores de la Universidad Veracruzana (UV), del Instituto Politécnico Nacional (IPN) y de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) coincidieron que en México existe talento e interés por la ciencia, sin embargo existe un número insuficiente de científicos debido a los problemas lacerantes de la sociedad actual, producto de la inequitativa distribución de la riqueza, la falta de vinculación entre industria y academia, así como la falta de políticas públicas que impulsen el desarrollo tecnológico.
Mediante conferencias y un panel moderado por Asdrúbal Flores López de la dirección de investigación de la UV, se expusieron investigaciones recientes y se reflexionó acerca de la situación actual de la ciencia en nuestro país, en el “Encuentro de divulgación científica, tecnológica e innovación”, organizado por el Centro de Investigación en Micro y Nanotecnología (Microna) de la UV.
Andrea Martínez López, coordinadora de Microna, y Claudia Mendoza Barrera, investigadora del mismo centro, informaron que el encuentro se realizó con la intención de generar el interés y divulgar el conocimiento científico entre la comunidad universitaria.
Por su parte, Adalberto Fox Quesada subrayó que hace falta compartir el conocimiento, “es importante que los investigadores lo compartan y distribuyan, que se conozca que en la UV se hace investigación”.
Las conferencias iniciaron con la participación de Alberto Cordero Dávila de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), quien expuso su proyecto “Del aula al universo” el cual consistió en el diseño y construcción de telescopios para escuelas con la intención de desarrollar el interés por la astronomía en estudiantes de primaria, secundaria y bachillerato. Los resultados mostraron que “existe un genuino interés por la ciencia, pero faltan recursos e iniciativa de los gobiernos para impulsarla”.
“Cerebro y su conducta” fue la siguiente conferencia donde el psicólogo Víctor Manuel Alcaraz habló del cerebro humano y su actividad, de la formación de las emociones, la función de los órganos sensoriales, y la trascendencia al conjuntar estos elementos que definen al ser humano. También explicó la creación de las adicciones en el cerebro, los problemas causados por ellas, así como la conformación del dolor y los sueños en la corteza cerebral.
“El estudio del cerebro nos permite descubrir mecanismos relevantes para nuestro quehacer diario” y afirmó que nuestro comportamiento se basa en respuestas prefijadas condicionadas por la genética y las circunstancias sociales.
El físico Gerardo Herrera Corral, del Instituto Politécnico Nacional (IPN) explicó, de manera general, el recorrido histórico de los 13 mil 800 millones de años que tiene el universo. Después del llamado Big Bang, hace 10 mil millones de años apareció la vida, la cual inició con los quarks y leptones que dieron origen a los átomos y a su vez formaron núcleos que propiciaron la luz. La conjunción de estos elementos generó los primeros organismos con vida y comentó que estas primeras etapas son las que actualmente están siendo investigadas por científicos de todo el mundo para descubrir cómo se formó el universo.
Por último, la innovación y la creatividad como detonante de la ciencia fueron abordadas por el director general de Innovación académica de la UV José Antonio Hernanz Moral, quien destacó “sin creatividad no hay ciencia, no hay innovación y no hay tecnología”. Asimismo afirmó que capacidades como la creatividad y el ingenio son las que ponderan hoy en día y que hay que tomar en cuenta que la innovación sólo se da en el marco de procesos sociales, políticos y culturales.
Exhortó a los jóvenes a permanecer al lado de personas que saben hacer ciencia, aprender de ellos y no perder de vista que la suma de inteligencia y creatividad apegadas a una realidad, genera un mundo innovador.
Las actividades culminaron con la participación y reflexión de los universitarios quienes expusieron el desaliento que impera al prepararse y no encontrar apoyo en el país para desarrollarse laboralmente.
Coincidieron con los científicos en que en los estudiantes está la oportunidad de crear nuevas coyunturas que impulsen el avance tecnológico del país, al mismo tiempo solicitaron el apoyo de la academia, y mencionaron que se pueden generar cambios si es que se da una vinculación real entre gobierno, industria e instituciones educativas que trabajen bajo un mismo fin: el desarrollo científico y tecnológico de México.