Ricardo Ravelo, reconocido periodista a nivel internacional egresado de esta alma máter y director general de la revista Variopinto, dictó la conferencia “Riesgos periodísticos” en el marco de la celebración del 70 aniversario de la Universidad Veracruzana (UV) y del 60 aniversario de la Facultad de Ciencias de la Comunicación (Facico).
Ravelo –reconocido por el trabajo que ha realizado y que aborda temas sobre el crimen organizado– estuvo acompañado por la académica Adriana Canales y Marco Malpica, director de la Facico, quien dio la bienvenida a alumnos y académicos presentes.
El periodista, quien hizo una pausa en su conferencia para expresar “me siento feliz de volver a mi alma máter”, felicitó a quienes hacen posible que la UV y la Facico cumplan aniversarios, y agregó que espera se sigan manteniendo en el buen nivel que han tenido durante tantos años.
El ponente habló de la labor del periodismo y dijo: “Es una labor que a partir del momento que se plantea hace público lo que está oculto; desde el momento en el que periodismo se propone indagar y buscar –desde el simple hecho de preguntar qué está pasando– se convierte en una labor que implica riesgos a cada minuto y en cada instante”, y recordó algunos casos de periodistas que han sido encarcelados injustamente a lo largo de la historia.
Destacó que “hasta donde vale la pena correr esos grandes riesgos, así como vale la pena la labor de informar”. Mencionó que se ha pasado por varios escenarios, entre ellos de la represión política al crimen organizado. “La labor del periodista se convirtió en una labor más incómoda, pero también más riesgosa, ya no sólo hay la censura de presidentes, diputados, legisladores, sino que ahora también el crimen organizado vino a trastornar la libertad de expresión, porque ya no sólo es para los jefes de información, sino para los reporteros directamente”, puntualizó.
Expuso que en la actualidad no existe un estado en el que los grupos criminales no hayan tocado a la prensa. Además, los grados de filtración que se han dado en los medios ha puesto a los periodistas en riesgo. Ravelo explicó que la labor del periodista es pública “y estamos muy vigilados”, esto facilita que los pasos de los periodistas sean seguidos, pues su trabajo no pasa desapercibido y el riesgo de ser secuestrado es cada vez más alto.
También habló del anonimato de la información, de las fuentes, del periodismo clandestino y anónimo, que son cuando algunas fuentes no desean que se revelen por lo peligroso que esto puede ser. Sin embargo, el crimen organizado ha logrado involucrar a editores, correctores de estilo que logran saber quién escribe la nota, por el puro estilo al momento de escribir.
¿Vale o no vale la pena ser periodista?
Ricardo Ravelo compartió sus experiencias, el tipo de amenazas que sufren los periodistas y qué se puede hacer en tales casos. Dijo que el exilio es una puerta que ayuda, cuida y protege, pero implica vivir en otros países, abandonar a los familiares, amigos, incluso la labor periodística.
Subrayó que en México no hay ningún proyecto, ni programa para protección hacia los periodistas: “No existe absolutamente ninguna garantía de que no nos pase nada cuando estamos haciendo una labor tan peligrosa como es informar, y ¿cómo es posible hacer periodismo de investigación en este escenario donde el crimen organizado ha tocado todo?”, cuestionó.
“Si la base del trabajo reporteril es la duda, debemos dudar de todo, porque es una forma de estar alerta”. Comentó a los estudiantes que se debe consultar, investigar y dudar de todo, consultar los documentos, verificar si en realidad es auténtico, y corroborar datos antes de publicar algo.
Para finalizar, Ravelo compartió algunos consejos para los futuros periodistas: “Hay que trabajar en redes con otros periodistas del mundo, hay que vincularse, estar informados a nivel internacional, monitoreando, porque son puertas que nos ponen a salvo en situaciones de emergencia. En muchos países como Colombia, en momentos más críticos los periodistas empezaron a establecer vínculos; por ejemplo, una información la publicaban dos o más medios. Acá es diferente porque a veces sólo es uno. En Colombia, Bolivia, Argentina, los periodistas están trabajando en redes, acompañados, ya no es una labor tan solitaria porque notaron que cuando la información es publicada por un sólo reportero es más difícil, y es una manera de protegerse”.
Otra manera de hacerlo es identificar plenamente a las fuentes de información. “Hoy ya no podemos darnos el lujo de publicar como fuentes anónimas, antes era más viable, factible, porque si nosotros no tenemos identificadas nuestras fuentes, no podemos publicarlo, nos pone en riesgo, porque a veces los mismos cart