Con la finalidad de fomentar el interés científico en las jóvenes generaciones, investigadores del Instituto de Biotecnología y Ecología Aplicada (Inbioteca) de la Universidad Veracruzana (UV) recibieron a una estudiante de escuela primaria que forma parte del programa estatal “Mis primeros pasos en la ciencia”.
Sol Alejandra Retureta Sánchez, alumna de segundo grado de la Escuela Primaria “Cuauhtémoc”, tiene ocho años de edad y un buen promedio de calificaciones; lo que más le gusta son los animales y tiene varias mascotas, entre ellas tres gatos: Pelusa, Félix y Güera. “Tengo más pero no les he puesto nombre”, explicó al señalar que afuera de su casa hay tarántulas y serpientes y no les tiene miedo.
Los niños que participan de este programa fueron seleccionados por su nivel de aprovechamiento, como parte del programa “Fomento a las vocaciones científicas y tecnológicas Veracruz 2014”, impulsado por la Secretaría de Educación de Veracruz.
La estancia de la niña en Inbioteca comenzó con la explicación acerca de las células, animales y vegetales, que le dieron los investigadores Mario Alberto Arteaga Vázquez y Ana Elena Dorantes Acosta.
Lo que más le gustó a Sol Alejandra fue conocer “sobre lo que hacen las células a los tejidos” y dijo que cuando sea grande le gustaría trabajar en un laboratorio.
“Queremos que Sol conozca qué es una célula, qué tipo de información tiene, para qué es importante y cómo estudiamos el ADN”, detalló Arteaga Vázquez.
Respecto al hecho de acercar a los niños al trabajo de investigación que realizan en el Laboratorio de Epigenética del instituto, recalcó que “la mejor forma de poder decidir lo que quieres hacer en la vida es justamente ir a donde se realiza”.
Este tipo de iniciativas son relevantes, abundó, “porque les permiten a los niños poder vivir qué significa ser un científico, tener la oportunidad de entrar a un laboratorio con personas que están haciendo investigación y hacer experimentos. Es fundamental para despertar la curiosidad científica”.
Para los investigadores, el hecho de explicar a una niña de primaria parte de su trabajo no fue tan difícil ya que durante tres años consecutivos han impartido talleres de ciencia para niños en la Feria Internacional del Libro Universitario.
“La naturaleza humana depende de la capacidad de asombro”, afirmó, “es muy bonito en biología porque siempre encuentras cosas que te asombran y hacen cuestionarte su porqué, y es la clave para los niños pues tenemos que mostrarles cosas que les causen asombro y despierten su curiosidad”.