El potencial terapéutico de los compuestos derivados de Cannabis sativa tiene un gran interés para el tratamiento de diversas enfermedades. Sin embargo, los efectos psicoactivos y, en particular, las alteraciones que estas sustancias producen a nivel cognitivo representan una limitación importante para el desarrollo de nuevos medicamentos basados en compuestos derivados de esta planta.
Una investigación, publicada recientemente en PloS Biology, ha conseguido disociar determinados efectos terapéuticos de los cannabinoides de sus principales efectos indeseables. Este avance identifica nuevas dianas terapéuticas en el sistema nervioso central y permite el futuro diseño de nuevos medicamentos.
Este estudio ha sido dirigido por Rafael Maldonado, jefe del Laboratorio de Neurofarmacología del departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud (CEXS) de la Universidad Pompeu Fabra, con Patricia Robledo, investigadora del Instituto Hospital del Mar de Investigaciones Médicas (IMIM) y Xavier Viñals como primer firmante, ambos miembros de su laboratorio.
El trabajo ha puesto de manifiesto que, en determinadas estructuras cerebrales, las moléculas responsables de los efectos psicoactivos de los cannabinoides, los receptores CB1, forman heterómeros (unidades compuestas de dos receptores distintos) con receptores de tipo serotonérgicos 5HT2A, que son también dianas de gran interés terapéutico.
«Estos heterómeros son los responsables de algunos de los efectos psicoactivos de los cannabinoides y, más concretamente, de las alteraciones cognitivas, la ansiedad y los efectos relacionados con la conducta social inducida por estas sustancias psicoactivas», explica Maldonado.
«La interacción entre los dos sistemas de receptores estaba descrita pero el mecanismo no se conocía. Se basa en el hecho de que los dos receptores se encuentran en las mismas estructuras del cerebro, la activación del receptor de serotonina 5HT2A libera un tipo de endocannabinoide y la pérdida del receptor CB1 en ratones interrumpe la actividad relacionada con la serotonina en la corteza prefrontal del cerebro», añade Robledo.
Los receptores CB1, responsables de la analgesia
En cambio, los receptores CB1 monoméricos, sin acoplar los mencionados receptores serotonérgicos, son los responsables de determinadas acciones terapéuticas inducidas por los cannabinoides, como sus efectos analgésicos.
Por tanto, en este trabajo se ha demostrado que es posible obtener de los cannabinoides respuestas analgésicas y, al mismo tiempo, evitar los efectos deletéreos no deseados sobre la memoria. Esto se logra mediante el uso de péptidos bloqueadores que actúan interfiriendo y disociando los receptores CB1 de los heterodímeros.
Como apunta Robledo, «uno de los efectos del principal ingrediente psicoactivo de la marihuana es el deterioro de la memoria, lo cual limita el uso médico de esta sustancia para el dolor, las náuseas o la ansiedad».
«El descubrimiento de estos heterodímeros y el beneficio que se obtiene de evitar su formación, abre nuevas posibilidades para diseñar herramientas farmacológicas que permitan desarrollar un uso terapéutico de los cannabinoides que eluda los principales efectos adversos conocidos de carácter psicoactivo de estas substancias», concluye Maldonado.
Referencia bibliográfica:
Xavier Viñals, Estefanía Moreno, Laurence Lanfumey , Arnau Cordomí , Antoni Pastor , Rafael de La Torre, Paola Gasperini, Gemma Navarro, Lesley A. Howell , Leonardo Pardo , Carmen Lluís, Enric I. Canela, Peter J. McCormick, Rafael Maldonado, Patricia Robledo (2015), “Cognitive Impairment Induced by Delta9- tetrahydrocannabinol Occurs through Heteromers between Cannabinoid CB1 and Serotonin 5-HT2A Receptors“, PLoS Biol 13(7): e1002194. doi:10.1371/journal.pbio.1002194.
(UPF)