Este año el Centro de Ciencias de la Tierra (CCT) de la Universidad Veracruzana (UV) contará con los mejores instrumentos de registro sísmico y personal capacitado a nivel nacional, lo cual permitirá desarrollar proyectos de investigación que serán de relevancia no sólo en el estado sino en todo el país, declaró su coordinador Ignacio Mora González.
Respecto de los proyectos de investigación recientemente terminados, detalló, se encuentran la asesoría a la Secretaría de Protección Civil para la elaboración del Atlas de Peligros de fenómenos Geológicos e Hidrometeorológicos de Veracruz, la Red Sísmica Estatal y un estudio geológico del Volcán San Martín, los tres financiados por el Fondo Nacional de Prevención de Desastres Naturales.
El Atlas de Peligros por Fenómenos Geológicos e Hidrometeorológicos del estado, abundó, fue un trabajo realizado en un lapso de cuatro años y medio durante los cuales se realizó un estudio detallado de los fenómenos naturales que afectan al estado, lo que implicó trabajo de gabinete de campo y de laboratorio.
Mencionó que los resultados obtenidos fueron montados en un sistema de información geográfica y forman una herramienta muy importante para que la Secretaría de Protección Civil Estatal tome las decisiones más adecuadas para la protección de la sociedad.
Explicó que el estudio geológico del Volcán San Martín es importante ya que se trata de uno de los dos volcanes activos ubicados en el estado de Veracruz; para esto se realizó un estudio detallado que tuvo por objeto integrar, en un formato de atlas, la información cartográfica, tanto la de carácter temático, que comprende topografía, pendientes, altimetría, hidrología, geología, suelos, entre otras, como la especializada, que incluye mapas de peligro volcánico por lahares (material fragmentado), caída de ceniza y coladas de lava, así como mapas de peligro geológico asociados con deslizamiento de laderas.
También en este proyecto se instalaron estaciones sismológicas sobre el edificio volcánico, para monitorear en forma permanente la actividad sísmica relacionada con el volcán, ya que esto permite verificar lo que ocurre dentro del volcán.
La red sísmica del estado está compuesta por 12 estaciones sísmicas distribuidos en todo el territorio del estado, incluyendo las estaciones de monitoreo del volcán Pico de Orizaba (Citlaltepetl) y del volcán San Martín en los Tuxtlas, con la finalidad de mantener vigiladas cada una de las regiones que fueron afectadas en el siglo pasado por sismos destructivos. Los registros de los sismos que se obtengan con esta red, permitirá tener un conocimiento más preciso del peligro sísmico en el estado así como detectar cualquier inicio de la actividad de los volcanes.
Respecto a otros proyectos relevantes, llevados a cabo por los investigadores del CCT, destacó el que en la actualidad desarrolla Carlos Manuel Welsh Rodríguez, relacionado con el cambio climático y el efecto que ha tenido en el comportamiento del mosquito transmisor del dengue.
Este trabajo es apoyado y financiado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, agencia científica dependiente del Departamento de Comercio de Estados Unidos de Norteamérica.
Otro más es la minimización del evento de los sismos en las estructuras que realiza Gilbert Francisco Torres Morales, que consiste en desarrollar nuevas tecnologías que puedan ser aplicadas en el ramo de la construcción, a fin de disminuir afectaciones como consecuencia de los temblores.
“Con esto se pretende hacer construcciones que resistan mejor estos eventos; se aplican técnicas geofísicas que permitan conocer el comportamiento de los suelos en diferentes zonas de una ciudad cuando ocurra un sismo y así poder saber qué tipo de estructuras deben construirse en estas zonas o evaluar si las que ya están construidas puedan resistir sus efectos, a esto se le llama estudio de microzonificación.”
Asimismo, indicó que María del Socorro Menchaca Dávila encabeza un proyecto relacionado con el manejo integral de cuencas y el Observatorio del Agua, en el cual se desarrollan indicadores que permitan medir el impacto de las políticas públicas en el tema de la escasez, calidad, servicios y abasto del agua.
Por último, compartió que actualmente trabajan en el desarrollo, mantenimiento y calibración de instrumentos de medición con objeto de poder mantener en buen estado de funcionamiento las redes de monitoreo y los equipos especializados utilizados en las investigaciones.