La sinestesia es un fenómeno neurológico que consiste en experimentar distintas sensaciones de manera simultánea. La Universidad Rey Juan Carlos (URJC) ha participado en una investigación internacional sobre uno de los tipos de sinestesia que existen: grafema-color, que consiste en la asociación de un color específico a las letras o los números.
Las primeras conclusiones apuntan a que algunas asociaciones entre grafemas y colores podrían ser universales. Hasta ahora, los estudios publicados se basan en casos de sinestesia en personas de habla inglesa. Sin embargo, esta nueva investigación ha analizado datos en cinco idiomas: inglés, holandés, español, japonés y coreano.
“Los estudios realizados en países de habla inglesa han mostrado una tendencia generalizada en las personas sinestésicas a asociar la letra ‘A’ con el color rojo, y se han investigado diversos factores (fonológico, semántico o forma visual) que podrían explicar esta asociación. Nuestro estudio es el primero que tiene en cuenta hablantes de otras lenguas e incluye el factor orden, es decir, el lugar que ocupan las letras en su serie ordinal: por ejemplo, la A es la primera letra del alfabeto romano”, explica Helena Melero, experta de la URJC y coautora del estudio.
La tendencia a asociar la primera letra del alfabeto con el color rojo también aparece en otros países de habla no inglesa y se debe al orden
“Gracias a este enfoque hemos podido observar que dicha tendencia a asociar la primera letra del alfabeto con el color rojo también aparece en otros países de habla no inglesa y que el único factor que nos permite explicar esta preferencia en los cinco idiomas evaluados es el factor orden”, añade la investigadora.
Estos resultados, publicados en la revista científica Cortex, presentan por primera vez evidencias sobre la existencia de tendencias comunes en personas sinestésicas con lenguas maternas diferentes.
El orden alfabético influye
La URJC ha colaborado con investigadores de las universidades de California, Ámsterdam, Corea, Tokio y Rikkyo (Japón) para analizar los diversos factores en las distintas lenguas. Los experimentos realizados han permitido evaluar la contribución de los diferentes elementos a la asociación entre los colores y las letras. Durante la investigación, se realizaron cuatro ensayos.
Como describe Helena Melero: “El primer experimento se llevó a cabo para constatar que los sinestésicos americanos también asocian la ‘A’ con el rojo con mayor probabilidad. En el segundo, investigamos la influencia del orden, la forma visual y el sonido sobre las asociaciones específicas observadas en los cinco idiomas”.
En la tercera prueba se exploró la posibilidad de que las asociaciones entre letras y colores pudieran deberse a determinantes semánticos. Y el cuarto y último experimento tuvo como objetivo responder a la pregunta más difícil, ¿por qué el primer grafema del alfabeto es de color rojo?”.
Los resultados de estos experimentos muestran que la ‘A’ es roja para los sinestésicos porque es la primera letra del alfabeto romano y ocupa por ello una posición destacada en el mismo. “A esa letra colocada en una posición destacada (la primera) le asignamos inconscientemente un color que por sus propiedades (perceptivas, evolutivas, cromáticas) destaca entre el resto de colores posibles”, concluye la investigadora.
Referencia bibliográfica:
Nicholas B. Root, Romke Rouw, Michiko Asano, Chai-Youn Kim, Helena Melero, Kazuhiko Yokosawa, Vilayanur S. Ramachandran, “Why is the synesthete’s “A” red? Using a five-language dataset to disentangle the effects of shape, sound, semantics, and ordinality on inducer–concurrent relationships in grapheme-color synesthesia”, Cortex, Volume 99, 2018, Pages 375-389, ISSN 0010-9452