En las jornadas académicas de Jazzuv, Jordi Albert hizo una profunda reflexión de mano del público, sobre el papel de la educación musical en el crecimiento de las naciones.
Al respecto comentó que la educación en general debe estar en las calles y evitar caer en la zona de confort, porque aseguró que hoy en día, la educación basada en el nepotismo y el mito de talento está mucho más favorecida económicamente.
Dijo que estos niveles de confort en la educación son excluyentes, agregó que siempre que haya convicciones éticas y ontológicas, se rescatará a los alumnos y a las institución de esto y en ese sentido, la educación musical debe ser replanteada.
Jordi Albert, director del centro de estudios musicales de Jazzuv comentó que en España, su país de origen entró en caos porque las gente se dedicó a refugiarse en la zona de comodidad y recalcó que es necesario que los músicos hagan algo por su país para evitar que se derrumbe.
Hizo énfasis en que México tuvo educación de la mejor calidad en los años 20, pero en la actualidad, los países se concentran en las políticas liberales, dejando morir de hambre a miles de niños cada día.
Aseguró que el educador musical debe hacer cosas de calidad y romper con el modelo que nos ha enseñado a poner menos de nosotros.
Señaló que en su papel como creador de modelos educativos, ha buscado promover la democracia real en los países, generando un movimiento asambleario entre alumnos y padres.
Jordi Albert hizo un llamado a los estudiantes de música, para que rescaten la música popular, porque si sus formas han perdurado por miles de años, hay que ser conscientes de que saben cómo dejar huella.
En la misma tónica comentó que hoy en día los medios de comunicación dictan las formas de cultura y no retratan lo que los individuos son en esencia.
Finalmente dijo que la música debe tener un compromiso social y comunitario, porque los sistemas políticos no pretenden unir a la gente, por ello el artista debe acercarse a los niños para generar redes de trabajo, además de reconocer las capacidades de todos los individuos.
Posterior a la charla tuvo lugar el concierto de La Joven Dixieland Band Jazz, integrada por alumnos de Jazzuv, quienes hicieron bailar a los asistentes con temas como Dawn by the river side y Alabama.
Además abrieron el cajón de los recuerdos con la pieza The first step of the Dixieland Band, la primera pieza de jazz que se grabó en la historia. Cabe mencionar que las primeras canciones de jazz no se grabaron porque la comunidad negra en los Estados Unidos, temía que su música fuera robada por músicos de la élite.
Para cerrar el concierto, participaron los niños del taller de Jazzuv, quienes interpretaron y bailaron dos canciones al lado de sus madres. Jordi Albert, quien dirigió el concierto, dijo que Jazzuv pretende ser un proyecto de conciliación familiar, por ello hacen que padres, maestros y niños participen de las actividades.