Las unviersidades públicas de México tienen una gran capacidad para renovarse y enfrentar los retos del siglo XXI, pero necesitan que el estado mexicano se comprometa con un financiamiento adecuado, expresó el rector de la Universidad Veracruzana, Raúl Arias Lovillo:

“Hay razones para ser optimistas, hay razones para que podamos decir que si el Estado mexicano se compromete en el futuro con un financiamiento adecuado, puntual y multianual, las universidades públicas del país tenemos la gran capacidad de renovarnos para enfrentar los retos del siglo XXI de esta gran nación mexicana”, puntualizó.

Arias Lovillo dijo que ante la incertidumbre financiera, no se pueden impulsar proyectos, si las escuelas no tienen la seguridad de que al siguiente año recibirán los fondos para darles seguimiento, lo cual es un factor crucial para la planeación a largo plazo de la investigación, los programas y los servicios universitarios.

“Tenemos que reformar el paradigma educativo”, enfatizó el rector de la Universidad Veracruzana.

Asimismo, expresó que las universidades públicas del país deben jugar un papel protagónico en la construcción de una mejor nación, pues “cada vez más hay voces que demandan situar a la educación como el centro estratégico del futuro de México”.

Arias Lovillo agregó que la educación superior debe contribuir a generar condiciones para que el país eleve su capacidad competitiva y, a la par, continuar con la formación ciudadanos libres, críticos, informados y comprometidos con su entorno social.

Los analfabetas de hoy son hijos de los analfabetas de ayer y esta carencia ha resultado en que México no tenga buenos indicadores, debido a que presenta bajos niveles en competitividad, tiene malos resultados en todos los niveles de educación, escaso desarrollo de doctores en ciencias y mala distribución del gasto público, por eso, cada día más es primordial que la educación sea el centro de nuestro futuro, dijo el rector Raúl Arias Lovillo, en el Coloquio de Otoño.

En las mesa que junto a los rectores de la UNAM, José Narro Robles, y de la UAM, Enrique Fernández Fassnacht, Raúl Arias Lovillo habló del estado de la Educación Superior en el país y las medidas que la UV ha tomado para enfrentar los retos de la enseñanza.

Debemos aspirar a un mejor país, dijo el rector, en el que las universidades tengan un mayor desarrollo, ya que la globalización cada día separa más y más a las clases sociales, en las que el rezago educativo, la falta de oportunidades de desarrollo y la falta de empleos dignos provoca una polarización cada vez más extrema, en la que los pobres son miserables, la clases medias se empobrecen y los ricos cada vez son más ricos.

“No olvidemos que las universidades deben formar individuos críticos, informados y comprometidos con su entorno social. No es fácil, porque tenemos que trasformar la educación mexicana y no es cosa de dineros sino de reformas”, dijo Arias Lovillo.

Comentó también que aunque es crucial reformar a las universidades, así como evaluar la calidad de los egresados y generar en ellos la conciencia de su entorno, existe un problema que atañe a la sociedad y a la enseñanza, la “changarrización de las universidades”, en las que cualquiera puede abrir una Universidad, así que es muy importante definir jurídicamente qué es una universidad, porque este hecho pone en juego el futuro de nuestro país y las familias.

Asimismo, dijo que esta multitud de escuelas que surgen y desaparecen por todo el país, las cuales oscilan entre las 3,000, 92 por ciento de ellas repiten los programas académicos, así que no están ofreciendo nuevas opciones y la oportunidad de formar alumnos competitivos en el mundo laboral y social.

Ya entrando en lo que respecta a las medidas que la UV ha tomado para contrarrestar la crisis de la educación superior, el rector dijo que la autonomía ha permitido a la UV impulsar y desarrollar varios proyectos con compromiso social, como las Casas UV, espacios que se han construido en zonas de alta pobreza, a donde se lleva internet, servicio de salud primarios y se impulsan proyectos productivos, en esas comunidades en las que los hombres han migrado a Estados Unidos y las mujeres se han convertido en líderes de familia y de la economía local.

En cuanto al apoyo a los trabajadores del campo, mencionó el Proyecto de restructuración productiva, el que con financiamiento de la ONU lleva profesionales de la UV a enseñar a las personas técnicas, dar guía y apoyar en la siembra, por ejemplo, de pimienta, maderas preciosas, jatropha (cuyo aceite se utiliza para crear biocombustibles) y hoja de guayabo, proyecto que es un éxito.

La Casa UVI o Universidad Intercultural también es un proyecto desarrollado para llevar la educación hasta regiones más alejadas y apoyar a los grupos indígenas.

Por último, aunque hay otros proyectos en la UV, mencionó el impulso incansable a la difusión artística y cultural con festivales como JazzUV, la Orquesta Sinfónica de Xalapa y el apoyo a uno de los museos más importantes de la región, como el MAX.

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