Un equipo de investigadores del ingeniería química de la Universidad de Vigo ha desarrollado métodos para obtener detergentes naturales –que podrán ser aplicados en farmacia y cosmética – a partir de residuos procedentes de la industria vitivinícola y del maíz
Según explica Xanel Vecino, una de las autoras del trabajo, el objetivo es conseguir productos de elevado valor añadido y más sostenibles a partir de residuos o subproductos de algo tan habitual en Galicia como son la vid y el maíz..
“Si bien en estos momentos el principal problema de la producción de biosurfactantes está relacionado con el alto coste que tienen los detergentes producidos biotecnológicamente en comparación con los detergentes sintetizados químicamente, en esta investigación logramos extraerlos de un subproducto de la industria del procesado del maíz a un coste que podría competir sin dificultad con los surfactantes sintetizados químicamente”, señala Vecino.
Podas de vides para tratar aguas residuales
En cuanto al aprovechamiento y revalorización de residuos de la industria vitivinícola y, más concretamente de las podas de las vides, en el tratamiento de aguas residuales Vecino destaca que esto supone un importante avance para un sector tan representativo como es la industria del vino en Galicia, dado que “permite obtener un plan real de minimización y revalorización de residuos en este sector industrial, disminuyendo así los costes de cánones de vertidos. En la actualidad, son muy pocos los viticultores que recogen las podas para su revalorización», añade.
En general, los restos de las podas se queman en el campo generando ciertos gases como el CO2, CH4 e N2O que favorecen el efecto invernadero, y solo en ocasiones muy puntuales se opta por incorporarlo como materia orgánica al suelo, pero al ser un material complejo su biodegradabilidad es muy lenta, a no ser que esta se potencie de alguna forma. «Por esto sería interesante mejorar la gestión de los residuos agroindustriales vertidos al medio ambiente, evitando la quema indiscriminada, mediante alternativas rentables para la revalorización de los mismos”, subraya la investigadora.
Tres patentes
Los biosurfactantes y bioadsorbentes pueden revalorizar las podas originando productos útiles con aplicación en diferentes sectores industriales.
En la primera patente, desarrollada en el proyecto, se ha demostrado la capacidad tensoactiva de los licores procedentes del lavado del maíz, lo que permite ampliar el abanico de aplicaciones que se le pueden adjudicar a este subproducto. La segunda describe un procedimiento para separar dos detergentes naturales presentes en los licores de maíz que se basa en un proceso de extracción líquido-líquido.
“Se observó además que estos licores exentos de los detergentes se podían seguir comercializando como medio nutricional en procesos fermentativos”, explica la investigadora.
La tercera y última patente, que está en trámites de concesión, se refiere a la composición del detergente que comprende este biosurfactante de origen natural obtenido a partir de los licores de maíz.
(Duvi)