Louis Godin, fue el astrónomo francés, que dirigió la expedición que determinó que el diámetro de la tierra es mayor en el Ecuador que en los polos, tal como había conjeturado Isaac Newton.
Nació en París, en el entonces Reino de Francia, el 28 de febrero de 1704, en el seno de una familia acomodada, pues su padre D. Francisco Godin, era abogado en el parlamento; su madre fue doña Isabel Charron.
Era un matemático notable, discípulo del astrónomo De l’Isle, que pronto se sintió atraído por la astronomía, tanto que se volvió experto en las observaciones astronómicas, y publicó estudios científicos de gran difusión en su época. Por su trabajo fue nombrado adjunto en la Academia de Ciencias de París el 29 de agosto de 1725.
En 1735 participó en la expedición organizada por la Academia de las Ciencias, a la Real Audiencia de Quito, en el Imperio español en Sudamérica (una región que hoy es parte de Ecuador), para medir el meridiano del Ecuador y determinar la forma y el tamaño de la Tierra, lo cual era un dilema que llevaba muchos años en discusión.
En esta expedición geodésica, denominada “Misión de los Académicos”, también participó el Botánico Charles Marie de La Condamine y el geómetra Pierre Bouguer, así como los científicos españoles Jorge Juan y Antonio de Ulloa.
La expedición permaneció en el Perú desde 1735 a 1742, con el fin de medir el grado de meridiano, como parte de los trabajos para establecer la medida del “metro” encargados por el gobierno de la revolución francesa.
Cayó en bancarrota por falta de fondos de parte del estado francés y de la academia científica francesa. Ante esto se fue a Lima, tanto para seguir sus investigaciones científicas como para obtener recursos. En 1744 fue nombrado catedrático de Prima de Matemáticas en la Universidad Real de San Marcos, además de que el Virrey del Perú lo nombró Cosmógrafo Mayor de Su Majestad Católica adjunto a dicha cátedra. En Lima, la ahora capital de Perú, también sintió los efectos del terremoto de 1746. Después del gran sismo participó activamente en los planes de restauración de la ciudad. Ese año, también se aprobó su diseño de la fortaleza del Real Felipe.
En 1751 decide regresar a Europa, pero nada había ya ahí para él, pues había sido prácticamente olvidado, producto de las vueltas que tuvo la Revolución Francesa en ese tiempo. Así, fue como perdió su condición de pensionado de la Academia y su fortuna se había esfumado en especulaciones desafortunadas.
En esa condición de pobreza aceptó el cargo de presidente de la Academia Naval de Cádiz, que le ofreció el marqués de la Ensenada, en nombre de la Corona española, en noviembre de 1753, además de que su hijo fue nombrado teniente ingeniero de marina, pero éste falleció poco después de viruela
Después viajó a Portugal, donde sintió un segundo gran movimiento de tierra, el gran Terremoto de Lisboa, de 1755. Ahí también ayudó a diseñar los planes para la reconstrucción de Lisboa.
En 1756 volvió a París para la boda de su hija y recuperar su puesto en la Academia. Tres años más tarde Louis Godin enfermo, socavado también por la muerte en 1758 de su hija.
Posteriormente dirigió Godin la Escuela de Guardiasmarinas de Cádiz, España, ciudad en la que falleció el 11 de septiembre de 1760.
Escribió sus Mémoires, 11 volúmenes de Histoire de l»Académie des Sciences de 1680 à 1699, y Appendix aux Tables astronomiques de La Hire.
La Unión Astronómica bautizó el cráter lunar Godin en su honor.