El Modelo Educativo Integral y Flexible (MEIF) de la Universidad Veracruzana (UV) se establece como un excelente recurso para los jóvenes estudiantes en la Facultad de Música, pues quienes muestren aptitudes extraordinarias avanzarán como lo permita su talento y no con base en el transcurso de los semestres que antes eran obligatorios, declaró Patricia Castillo, académica de esta entidad.
Agregó que este modelo permite que los estudiantes se ubiquen en el nivel correspondiente a su habilidad y capacidad de aprovechamiento, lo que también ha contribuido a los recientes logros que varios de ellos han obtenido:
La joven Argentina Durán obtuvo el tercer lugar del Concurso Angélica Morales de la Ciudad de México. En la séptima edición de la Bienal de Mexicali, el primer lugar fue para Ricardo Vélez, alumno de Oscar Tarragó; el segundo, para Manuel Casas, que estudia con Patricia Castillo; el tercero, para Rafael Marenco, quien se prepara bajo la guía de Laura Sosa; otro primer lugar –éste en categoría distinta– para un joven que se prepara con Jorge Covarrubias y el segundo para otro que estudia con Miguel Flores, indicó la pianista y clavecinista.
El alumno de Covarrubias compartió el premio con una pianista de origen japonés que estudia en Estados Unidos, ya que este concurso bajacaliforniano muestra la particularidad de que admite participantes de la Unión Americana.
Para la académica, Xalapa es un lugar en que los jóvenes se encuentran inmersos en actividades culturales. “Ese ambiente de conferencias, conciertos, exposiciones, ballet y demás, estoy segura que les permite desarrollarse en un contexto apropiado. Además, la sana competencia es lo que ha hecho crecer el nivel.
”Cuando entré a esta Facultad, cuando un chico preparaba un concierto para piano y orquesta era porque ya se encontraba a punto de titulación. Hoy hay jovencitos como Manuel, que apenas se encontraba en el nivel preparatorio cuando, gracias al MEIF, preparó obras de enorme dificultad, presentó su examen y fue ubicado en un nivel que le ha permitido avanzara dos años en su carrera.”
La carrera de Piano es prolongada. Exigía al alumno dos años en nivel iniciación, cuatro en nivel preparatorio y otros cuatro en profesional, “pero todo joven puede avanzar en la medida de sus aptitudes, si aprueba los exámenes teóricos y de instrumento”.
El MEIF fue adoptado por la Facultad apenas tres semestres atrás, y hoy presenta la posibilidad de que un joven que avance en sus créditos pueda culminar la carrera en tres años y medio. “Antes no era posible eso, no había flexibilidad y con todo el talento del mundo un estudiante debía cursar los 10 años de la carrera”, indicó la profesora.
Un ejemplo de lo anterior ha sido la pianista Claudia Corona, quien años atrás primero obtuvo su maestría en Alemania y después pudo recibirse en la Facultad de Música. Manuel Casas es otro ejemplo, llegó apenas hace dos años a Xalapa procedente de Oaxaca, ha progresado enormidades y hoy toca obras por demás complicadas.
En la actualidad, Castillo cuenta con varios estudiantes que muestran posibilidades de desarrollo importante. Ricardo Rodarte preparó dos programas obligatorios en seis días, presentó tesis y ganó mención honorífica; hoy cursa su maestría y desea hacer doctorado.
Gerardo Munguía, otro muchacho de gran potencial, es muy dedicado y ya ofrece numerosos recitales en diversas ciudades. Michel Casas ganó recientemente mención en Costa Rica y prepara un recital con obras de Camille Saint-Saëns.
“El repertorio de ellos es muy avanzado y eso surge por iniciativa propia”, explicó Castillo. “Proponen una cierta obra, ambiciosa y difícil, y aunque el maestro sugiera prudencia, ellos mismos se lo plantean como reto. No es raro encontrar jovencitos que ya están sobre obras tan difíciles como la Sonata en si menor de Liszt, la Sonata opus 111 de Beethoven, el Segundo concierto de Rajmaninov, el Concierto para la mano izquierda de Ravel y otras”.