Para que México destaque en el ámbito deportivo internacional hacen falta más recursos humanos capacitados de manera profesional, opinó el director Técnico Operativo del Comité Organizador de los XXII Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe, Veracruz 2014, Ivar Sisniega Campbell.
“Creo que la mayor limitante para el deporte mexicano son los recursos humanos capacitados. Cuando digo personas preparadas, son también directivos, es decir, que quien llega a un cargo público tenga por lo menos una licenciatura”, dijo.
Ivar Sisniega mencionó que Cuba es un país mucho más pobre que México, pero de las primeras acciones que hizo Fidel Castro a su arribo al gobierno, fue generar maestros de educación física. Desde 1973 en la isla se imparte la Licenciatura en Cultura Física, con casi nivel de maestría, “y es lo que hace que sigan siendo, con todo y sus restricciones, un referente en el deporte”, añadió.
El medallista panamericano participó en el Coloquio Veracruzano de Otoño “Los desafíos del deporte en México”, el jueves 28 de noviembre en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información, con la conferencia “El futuro del deporte en México”.
Sisniega Campbell compartió que le gustaría que México obtuviera resultados internacionales acordes a su estadística demográfica y económica, pues está dentro de los 20 países mejores del mundo en muchos parámetros, y este rubro “no debe ser la excepción”.
Además se pronunció porque el país sea competitivo en todas las disciplinas olímpicas, para lo cual es necesario “tener una concepción del deporte amplia e incluyente”, y que haya grandes eventos deportivos regionales y a nivel nacional e internacional.
El ex presidente de la Comisión Nacional del Deporte (1994-2000) subrayó la importancia de continuar en el camino de la descentralización del deporte, para que el desarrollo de atletas se dé en cada entidad de la República.
A manera de ejemplo mencionó: “Si lo que se invirtió en el Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo –que fueron aproximadamente mil millones de pesos– se hubiera repartido en toda la República, les garantizo que hoy sería diferente el deporte, porque tendríamos 10, 15, 20 centros de alto rendimiento en todo el país, que estarían produciendo muchos más deportistas que un solo centro en la Ciudad de México”.
Sin embargo lamentó que en el país los presupuestos para el deporte son “cambiantes”, sobre todo a nivel municipal, que es donde se pueden hacer los grandes cambios a favor de la práctica deportiva y la activación física.
Sisniega Campbell también abundó en la importancia de tener un sistema de detección de talentos en la etapa juvenil (para que éstos tengan apoyo continuo y puedan llegar al alto rendimiento) y que haya una formación constante de entrenadores profesionales.
Añadió que para tener cada vez más entrenadores mexicanos profesionales al frente de los equipos deportivos, es necesario tener sistemas de actualización, certificación y formación, lo que “tendría que ser una prioridad en el deporte”.
El conferencista también insistió en la importancia de que en el país haya investigadores y científicos que desarrollen estudios basados en la población mexicana, toda vez que “tenemos que conocer nuestra realidad para poder de ahí hacer planteamientos a futuro”.
Destacó la importancia de tener espacios para práctica deportiva en las escuelas del país, así como promover el deporte universitario competitivo.
“Creo que el sueño o aspiración tendría que ser que todo atleta (o la gran mayoría) de alto rendimiento de México pasen por la universidad, donde reciban un impulso en su formación tanto académica, intelectual y social, como en la parte deportiva”, insistió.
Según él, en la medida que se logre que los padres y madres de familia entiendan que el deporte es una parte fundamental de la educación de sus hijos, “en el futuro tendremos mejores deportistas y también una población más activa”.
Entre los beneficios que se obtienen invirtiendo en deporte está una buena salud, un mejor estado de ánimo, menores índices de delincuencia y adicciones y mayor productividad, “se vale soñar, se vale trabajar para que esto sea posible”, concluyó.