PRAISE es una plataforma social de aprendizaje que reúne opiniones de su colectivo de usuarios, funciones analíticas avanzadas y herramientas de planificación y supervisión de lecciones para profesores. Por todo ello, supone un gran paso adelante en el aprendizaje colaborativo a través de Internet.
«Recibir opiniones y comentarios es fundamental para aprender», explica Carles Sierra, profesor e investigador en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y coordinador del proyecto PRAISE. El proyecto tiene por finalidad llenar un vacío en el campo del aprendizaje por Internet mediante la creación de una red social para la formación musical con herramientas que permitan el intercambio de opiniones entre los usuarios.
Por medio de la plataforma Music Circle del proyecto PRAISE, los estudiantes de música pueden subir sus grabaciones y recibir comentarios detallados de otros miembros de la comunidad. Gracias a herramientas avanzadas, los revisores realizan sus comentarios en forma de anotaciones en un punto exacto de la representación gráfica de la señal de audio.
Los compañeros de los «estudiantes» pueden comentar «este crescendo es precioso» o «este pasaje es muy expresivo», apunta el profesor Sierra. «Esta secuencia de comentarios estructurados y este grado de precisión no existían en las metodologías en línea creadas hasta la fecha para proporcionar comentarios sobre música».
Una red social de alumnos
PRAISE es una plataforma de medios sociales basada en la web, por lo que un comentario puede dar raíz a otros muchos. Estos hilos de conversaciones contribuyen a crear una comunidad de personas que dan y reciben opiniones, comunidad que termina convirtiéndose en una red social de alumnos.
Aparte de las opiniones que dejan los usuarios, las sofisticadas herramientas de PRAISE también generan información automática. Por ejemplo, los estudiantes pueden interpretar determinada pieza y el software dirá al estudiante si ha reproducido las notas correctas en el tempo adecuado. Además, si el estudiante sube una nueva grabación, se identifican las partes donde ha mejorado y aquellas donde se ha producido un retroceso.
Una herramienta de aprendizaje que puntúa
PRAISE es algo más que una plataforma para dar y recibir opiniones. Sus herramientas también permiten a los profesores de música crear programas de estudio y supervisar los progresos de sus alumnos a través de Internet.
Además, PRAISE resuelve un problema que afecta a muchos cursos en línea masivos en abierto (conocidos como MOOC, sigla en inglés de «Massive Open Online Courses»). Puesto que resulta físicamente imposible que un solo profesor corrija a los miles o incluso decenas de miles de estudiantes que podrían seguir la formación a través de Internet, muchos MOOC recurren a un sistema de evaluación por parte de los propios compañeros de los alumnos. Sin embargo, este planteamiento no da buenos resultados porque los estudiantes no pueden puntuar del mismo modo que lo haría un profesor.
Para solucionar este problema, un profesor evalúa solo a unos pocos estudiantes, y estos evalúan sucesivamente a varios de sus compañeros. Seguidamente, PRAISE emplea un algoritmo para identificar las evaluaciones de los estudiantes que más se parecen a las realizadas por el profesor y se concede a estas más relevancia. De esta forma, el sistema de puntuación del profesor se propaga al resto de alumnos.
«En los MOOC, las puntuaciones suelen reflejar un promedio de las opiniones de los estudiantes con respecto a los demás», afirma el profesor Sierra. «En cambio, nuestro sistema traza mediante cálculos una red de confianza que da preponderancia a las valoraciones del profesor».
Una actividad in crescendo
Más de veinte mil estudiantes que han terminado un curso de piano de jazz en Coursera han utilizado la plataforma Music Circle de PRAISE, empleada también por unos ciento cincuenta estudiantes de música del Goldsmiths College de la Universidad de Londres y por varios más de la ESMUC de Barcelona.
«Una de las ventajas de Music Circle es que no tiene costes, mientras que pagar a un tutor cuesta un auténtico dineral», apunta el profesor Sierra.
Las herramientas del proyecto se han aplicado además a otros ámbitos, como el aprendizaje del inglés.
En PRAISE participan investigadores del Instituto de Investigación en Inteligencia Artificial (IIIA) de Barcelona, el Goldsmiths College de la Universidad de Londres, la Vrije Universiteit Brussel y el Laboratorio de Ciencias Informáticas de Sony en París. Algo que hace a este proyecto único y que ha propiciado una colaboración tan fructífera es que los investigadores de PRAISE no solo comparten un gran interés por la inteligencia artificial, sino también el amor por la música. Muchos de ellos son músicos de gran talento.
PRAISE recibió cerca de 2,3 millones de euros de financiación de la UE y estuvo activo desde 2013 hasta 2015.
(European Comission, CORDIS)