Con una concurrida y festiva asistencia se realizó hoy en un hotel de la Ciudad de México la ceremonia de premiación de la XXIII Olimpiada Nacional de Química y se anunció a la preselección que en breve iniciará su preparación para representar a nuestro país en las próximas olimpiadas, Internacional e Iberoamericana, que tendrán lugar este año en Vietnam y Uruguay respectivamente.
En la clausura del certamen en la que se entregaron las medallas a los ganadores luego de tres días de exámenes teóricos y prácticas experimentales, las delegaciones que se convirtieron en las triunfadoras de esta edición fueron Chihuahua, con cuatro preseas de oro y una de plata; Jalisco con dos de oro, dos de plata y dos de bronce (2-2-2), Veracruz (2-1-3), Campeche (1-1-2), Yucatán (1-2-1) y Sinaloa (1-2-2).
Después de conocer a los ganadores de las preseas de la competencia que organiza la Academia Mexicana de Ciencias, se anunciaron los nombres de quienes a partir de hoy conforman la preselección del equipo mexicano.
“Los 15 alumnos que representarán a nuestro país y que fueron seleccionados son los que tienen las mayores oportunidades de obtener un buen resultado. Aunque terminó la olimpiada sigue un camino arduo y de mucho esfuerzo para ellos en la preparación y los entrenamientos rumbo a los compromisos internacionales”, dijo Mauricio Castro, que junto con Antonia Dosal, coordinan a nivel nacional el certamen.
Esta preselección se integró con estudiantes ganadores de alguna medalla, y las entidades federativas que más participantes colocaron en este primer equipo fueron Chihuahua con tres alumnos, así como Veracruz y Querétaro, con dos cada una.
Dentro de los preseleccionados destaca la presencia de Julio Gaxiola López y Edith Leal Sánchez. El joven sinaloense ha participado en dos Olimpiadas Iberoamericanas en Argentina y Bolivia, y una Olimpiada Internacional en Rusia, en las que obtuvo dos segundos lugares y un primer lugar, por lo que ahora buscará su cuarta participación a nivel mundial. Mientras que la estudiante jalisciense también intentará estar en el equipo mexicano, luego de ganar el primer lugar en la pasada Olimpiada Iberoamericana celebrada en La Paz.
“Las olimpiadas son un ejercicio de conocimiento. Invito a los jóvenes a participar en ellas porque no solo tienen un impacto científico, sino social y cultural también.”, expresó Gaxiola, quien agregó que certámenes de este tipo premian el esfuerzo de los estudiantes, sus profesores y sus familias.
Edith Leal, quien fue la primera mujer en ganar el concurso a nivel regional, manifestó que participar en la olimpiada es hasta ahora la mejor experiencia de su vida.
En la ceremonia se reconoció de manera especial la labor de los 32 delegados estatales presentes en la olimpiada, a quienes se les hizo entrega de un reconocimiento y hubo palabras de agradecimiento pues sin su labor -en algunos casos de más de 20 años-, sería imposible la realización de la olimpiada. Los casi 200 estudiantes y un extenso grupo de familiares presentes en la ceremonia aplaudieron de pie a sus delegados.
Antonia Dosal expresó su satisfacción porque el nivel académico de la fase nacional del concurso se ha preservado, sobre todo en aquellos estudiantes de bachillerato que ocupan los primeros lugares, y porque la olimpiada mantiene una alta convocatoria año con año.
“Fue agradable constatar que el 90% de las delegaciones pudieron tener al menos un representante en la etapa experimental -la segunda del certamen-, pese a que algunas entidades no tienen acceso a laboratorios de química, lo que ocurre mucho a nivel nacional”.