Reciclando pilas y baterías mediante biolixiviación


Una pila puede llegar a contaminar hasta 600.000 litros de agua y afectar la salud y el medio ambiente. Esta fue una de las principales motivaciones por las cuales cinco jóvenes profesionales de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y uno de la Universidad Ricardo Palma (URP) formularon una propuesta para la creación de una planta piloto para tratamiento de pilas y baterías a través del método de biolixiviación.

Los jóvenes explicaron que las pilas y baterías usadas son desechos electrónicos que contienen metales pesados, los cuales al ser liberados, producto de la corrosión, afectan la salud y el medio ambiente.

Entre dichos metales pesados están el litio, que es neurotóxico y daña los riñones; el cadmio y el mercurio son cancerígenos; el níquel daña la piel, y el plomo afecta el sistema nervioso, el sistema reproductor y los riñones. Así, surgió la idea de generar una planta de tratamiento mediante la biolixiviación.

“La biolixiviación es un método innovador y ecológico para la recolección, almacenamiento y tratamiento de las pilas y baterías; el cual consume menos energía y resulta ambientalmente amigable y sostenible”, informó Robert Ccorahua Santo, genetista biotecnólogo por la UNMSM.

En tal sentido, reciclar pilas y baterías es importante, refirió, porque evita impactos nocivos al medio ambiente, disminuye el consumo de recursos para producir materias primas y protege la salud de las personas evitando enfermedades respiratorias, neurológicas, renales, gastrointestinales, entre otras.

No tirar las pilas junto con la basura, usar pilas recargables, reciclar pilas y baterías y depositarlas en el contenedor más cercano, fueron algunas de las recomendaciones que hicieron los integrantes del equipo de trabajo.

(UNMSM/DICYT)

Los comentarios están cerrados.