Las fotos de la recuperación de los motores están aquí

El dueño de Amazon, Jeff Bezos, anunció el miércoles que Bezos Expeditions recuperó dos motores de un cohete Saturno, que se supone fueron utilizados en la misión espacial Apolo 11, utilizando el barco de exploración Seabed Worke.

El empresario informó que los restos corroídos se encontraban en el fondo del Océano Atlántico, enterrados a una profundidad de 4 km y que serán restaurados con fondos privados, para ser expuestos en el futuro

Hace un año, Bezos Expeditions anunció que había encontrado la locación exacta de los cohetes F-1 utilizados por el Apolo 11, que llevó al primer hombre a la Luna en 1969, los cuales cayeron en el océano Atlántico, donde permanecieron hasta esta expedición.

“Hemos visto una maravilla submarina, una increíble escultura jardín de motores F-1 retorcidos que cuentan la historia de un final intenso y violento, uno que sirve como testamento al programa Apolo”, dijo en su blog Jeff Bezos.

Bezos describe que para la recuperación se utilizó tecnología “como de otro mundo, como la tecnología Apollo en si misma”, pues se utilizaron vehículos operados de forma remota a más de 4.200 metros de profundidad, guiados a través de fibra óptica y cables eléctricos con más de 4.000 voltios.

La intención es restaurar lo que queda de los motores y evitar que sufran mayor corrosión. “Queremos que el hardware cuente su verdadera historia, incluyendo la re-entrada a 8.000 km/h y el impacto con la superficie del océano. Estamos emocionados de exhibir este equipo que quizás pueda inspirar algo increíble”, afirmó.

En un principio Jeff Bezos anunció que estos eran los cohetes del Apolo 11, pero todavía se carece de la seguridad de que lo sean.

Cuando anunció el descubrimiento y la intención de sacarlos del mar, apuntó que “tenía cinco años cuando vi al Apolo 11 en televisión, sin ninguna duda de que eso sería un gran contribuyente a mi pasión por la ciencia, ingeniería y la exploración. Un año atrás, empecé a preguntarme, si tuviera el equipo correcto de profesionales submarinos, ¿podríamos encontrar y potencialmente recuperar los motores que comenzaron la misión de la humanidad a la Luna?“, escribió Bezos.

El descubrimiento lo realizó usando sonares de última tecnología, “el equipo encontró los motores del Apolo 11 a 14,000 pies (4,260 metros) bajo la superficie, y estamos haciendo planes para intentar extraer uno o más de ellos desde el fondo oceánico. No sabemos todavía las condiciones en que están estos motores – golpearon el océano a alta velocidad y han estado en agua salada por más de 40 años. Por otro lado, están hechos de material resistente, así que veremos”.

La expectativa de Bezos es que por lo menos uno de esos cohetes, propiedad de la NASA, se envíen “al excelente Museo del Vuelo en Seattle”, el cual es financiado por el propietario de Amazon.

Los comentarios están cerrados.