Se debe repensar la educación superior: Julio Frenk, miembro 101 de El Colegio Nacional

El contexto actual que se vive en nuestro México y en el mundo ofrece un momento idóneo para repensar la forma en que se imparte la educación superior, afirmó Julio Frenk Mora, durante la lección inaugural:  La salud y la educación superior: Tiempo de transiciones, con la cual ingresó hoy como miembro 101 de El Colegio Nacional.

“Un informe de la revista Lancet, publicado cuando fui copresidente de una comisión internacional sobre la educación de los profesionales de la salud y primer autor del informe respectivo en 2010, documentó la persistencia de graves desequilibrios cuantitativos y cualitativos entre la oferta y la demanda de profesionales de la salud, desequilibrios que se manifestaban con mucha claridad también en otros campos.

“Es por ello, que este momento ofrece una oportunidad única por la convergencia de cuatro factores que finalmente pueden hacer posible la revolución educativa del siglo XXI”, expuso el director fundador del Instituto Nacional de Salud Pública de México.

El primer factor se refiere a los avances en las ciencias cognitivas que permiten entender mejor cómo aprendemos las personas; el segundo, a la expansión de la demanda global por educación superior alimentada por la reducción de la pobreza y el surgimiento de una clase media global consciente del papel de la educación superior en la movilidad social; el tercero, al dinamismo sin precedente en los mercados de trabajo generado por los avances en la automatización y la inteligencia artificial; y el cuarto, a las innovaciones tecnológicas  que han hecho posible el desarrollo de plataformas para la educación en línea de alta calidad, así como las experiencias de inmersión educativa mediante simuladores de realidad virtual.

“Con el dinámico contexto antes descrito, es que resulta más que pertinente lanzar una nueva estrategia de educación superior con dos dimensiones: una pedagógica y otra institucional. La primera que se ha caracterizado por ser tubular, en donde los estudiantes ingresan al espacio educativo, pasan un periodo fijo de su vida ahí y finalmente se gradúan para siempre. En cambio, lo que se requiere ahora es una arquitectura abierta, donde los estudiantes y egresados entren y salgan de la universidad en múltiples ocasiones a lo largo de su ciclo profesional conforme vayan cambiando las condiciones del mundo del trabajo y por lo tanto, las necesidades educativas.

“Sobre esa reorientación estratégica, será necesario emprender un rediseño educativo que tenga como componente central el aprendizaje basado en resultados; la educación personalizada, paralela a la medicina personalizada y el aprendizaje experiencial, que supone la inmersión del estudiante en la realidad como fuente de conocimiento. Es necesario que todo estudiante viva una experiencia educativa integral, con tres niveles sucesivos de aprendizaje: informativo, formativo y transformador”, recomendó el exsecretario de Salud del gobierno federal.

Frenk, quien es desde 2015 rector de la Universidad de Miami, en Estados Unidos, indicó que la dimensión institucional de la nueva estrategia educativa tendría que comprender el fortalecimiento de capacidades mediante la inversión en el desarrollo profesional del profesorado para que aprenda a enseñar bajo los nuevos enfoques pedagógicos. Otra medida fundamental remite a las innovaciones en el diseño de salones de clase, materiales pedagógicos y plataformas tecnológicas. En nuestro mundo interdependiente, es necesario así mismo contemplar la creación de nuevas formas de organización que aprovechen las tecnologías de la información y la comunicación para explotar complementariedades entre instituciones y con ello, promover la vinculación global, por ejemplo, por medio de consorcios internacionales de instituciones educativas.

Como conclusión de su lección de ingreso a El Colegio Nacional, Frenk Mora, quien también ha sido decano de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Harvard, señaló que “hay profundas conexiones entre las revoluciones de la salud y de la educación superior, ya que ambas actúan como determinantes recíprocas; un mejor desempeño educativo genera mejores condiciones de salud y viceversa. Además de que la conexión más importante se da por medio del conocimiento, el cual representa el producto central de las universidades y la fuente principal de mejoramiento de la salud”.

La producción escrita del doctor Frenk Mora consta de 23 libros, 15 monografías, 79 capítulos de libros, 167 artículos en revistas académicas y 129 artículos en revistas culturales y periódicos. Sus publicaciones académicas han sido citadas alrededor de 15 mil veces. Todo lo anterior, aunado a cuatro novelas para niños y jóvenes, las cuáles explican el funcionamiento del cuerpo humano, mencionó el doctor Enrique Krauze durante la lectura de la biografía del miembro 101 de El Colegio Nacional.

El doctor Guillermo Soberón, exrector de la Universidad Nacional Autónoma de México – institución que forma parte de la mesa directiva del Foro Consultivo Científico y Tecnológico- fue el encargado de dar contestación a la lección inaugural.