Jaime Alán Méndez Sánchez, originario del municipio de Misantla, tiene 23 años, cursa su segunda licenciatura y una maestría en la Universidad Veracruzana (UV). Es, además, delantero del equipo de basquetbol universitario Halcones. Con la triple responsabilidad hay semanas en las que sólo lograr dormir una noche, pero está seguro que de todo lo que hoy hace, mañana cosechará grandes beneficios.

         “De la maestría me encargan leer libros de una semana para otra, de la licenciatura me encargan tarea, no puedo faltar a los entrenamientos, tengo que ir a correr, a hacer pesas, todo. Es un sacrificio muy grande pero creo que la combinación de todo me dará un mayor beneficio, porque cuando más se sufre las recompensas son mayores”, dijo.

          Todos los días Jaime Alan está saturado de actividades escolares y deportivas, pero hay una fuerza que lo impulsa a no quebrarse: sus padres.

         “Mi papás son la fuerza que yo tengo. Yo sé que ellos están sufriendo bastante para mandarme dinero y sustentarme todo. Ellos me pagan la renta, las proteínas que necesito, todo; son mi motivación para pararme temprano –a las siete de la mañana– e irme a estudiar, o no dormir e irme así a la escuela, llegar a mi casa, comer, regresar a las pesas y de ahí entrenar con el equipo.”

         Una vez dentro de la cancha, Jaime Alan deja todo a un lado –presiones, estrés, carencias– y sólo piensa en las jugadas a ejecutar con los Halcones.

“Saliendo de la cancha obviamente regreso a lo mismo: hacer reportes, preparar la tarea de la licenciatura, hacer proyectos”, aclaró.

Estudió la Licenciatura en Sistemas Computacionales Administrativos y a la fecha cursa la de Gestión y Dirección de Negocios, ambas de la Facultad de Contaduría y Administración, campus Xalapa. Además estudia la Maestría en Gestión de la Calidad en la Facultad de Estadística e Informática, también de este campus.

Relató que el año pasado concluyó la primera licenciatura y al jugar los fines de semana intentó ingresar a una maestría que se impartía de manera virtual, pero al no haber matrícula sufriente no se abrió.

         Su apremio era continuar dentro de la UV para participar en la Universiada, por lo cual decidió entrar a otra licenciatura, con la ventaja de que logró revalidar materias del Área de Formación Básica General y en dos años la concluye.

“La Licenciatura en Gestión y Dirección de Negocios era mi segunda opción de estudio, y ahora que la curso confirmo que es agradable, me gusta mucho.”

Respecto a la Maestría en Gestión de la Calidad, postergó su ingreso hasta este período agosto 2013-enero 2014, principalmente por dificultades económicas.

“La maestría es fantástica, ahí vemos lo que las empresas buscan en su producto y lo que el cliente busca en la empresa. Me agrada, me llama mucho la atención.”

La pasión que Jaime Alan tiene por el basquetbol lo acompaña casi desde su nacimiento, pues su familia es aficionada a esta disciplina deportiva.

 “Mi primer balón lo tuve a los tres años y ya no lo solté. Me gusta jugar, me encanta estar en la cancha. Al principio lo tomaba como un entretenimiento, ahora lo veo más como algo que necesito para estar bien conmigo mismo. Me relaja, me pone de buenas. Siempre que estoy en la cancha estoy feliz.”

Pero también su familia le inculcó que la educación es algo primordial en la vida y desde muy pequeño sus padres no lo dejaban jugar si no tenía buenas calificaciones, por ello desde que dejó su pueblo y llegó a Xalapa para estudiar en la UV ha podido ser responsable con su desarrollo académico y deportivo.

En estos 20 años de vida deportiva, Jaime Alan ha viajado a casi todo el país en ligas regionales, estatales y nacionales, y por ende ha conocido muchas personas interesadas en esta disciplina deportiva, algo que también lo enorgullece.

Con un metro 90 centímetros de altura, es el tirador de Halcones, está “obligado” a lograr puntos a favor de su equipo, pasar el balón al territorio del contrincante, colarse hasta el área de tiro, posición que calificó como “complicada y encantadora”.

Por la pasión al basquetbol y los compromisos que ha adquirido con éste, Jaime Alan ha tenido que sacrificar reuniones familiares en Navidad o fin de año, las fiestas de 15 años de sus hermanas, velorios de seres queridos y más.

Sin embargo considera que el basquetbol se lo ha gratificado muy bien, sobre todo durante su estancia en el equipo universitario de los Halcones. Para el estudiante, se trata de un proyecto de tal magnitud que “todavía no lo asimilamos bien como Universidad”.

Destacó que en esta temporada 2013-214 de la Liga de la Asociación de Basquetbol Estudiantil (ABE) es la primera ocasión que se competirá con las mejores universidades del país.

“Tenemos excelentes entrenadores y la capacidad para enfrentarnos a esos equipos, ya lo hemos demostrado, sin embargo le faltaba apoyo al basquetbol universitario, una buena administración para poder estar en la ABE. Ojalá la UV siga apoyando porque es un proyecto muy grande que beneficia no sólo a los jugadores, sino a estudiantes y a la institución pues le da más prestigio.”

Por ello agradeció a las autoridades académicas el apoyo y la oportunidad que están dando al equipo de basquetbol universitario Halcones, y aseguró que darán buenos resultados para que la UV continúe con el impulso a este proyecto “y que dure para siempre”.

Añadió un mensaje para la comunidad estudiantil: “Vayan a los partidos, necesitamos su apoyo. No nos comparen con el equipo profesional, no somos un rival para ellos, tampoco queremos reemplazarlos. Es un basquetbol totalmente diferente, el nuestro es más atlético, más rápido, más emocionante”.

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