La ciencia y la tecnología han avanzado a tal grado que es posible detectar si una persona contiene un gen que le provoque una enfermedad si se expone a ciertas condiciones que la detonen. Bajo este contexto, la doctora Blanca Estela del Río Navarro, del Hospital Infantil de México Federico Gómez, colaboró en una investigación en la que identificó una serie de genes en población mexicana que al estar en un “ambiente inadecuado” detona en obesidad.
El estudio realizado en niños y adultos mestizos mexicanos demostró que existe una relación entre el índice de masa corporal y la circunferencia de cintura con 12 SNP´s (siglas que con se denominan a las alteraciones en los genes) que representan un factor de riesgo para desarrollar dicha enfermedad.
“Ya identificamos los genes pero se necesitan condiciones específicas para que se expresen. Por eso al identificar a personas con estas alteraciones puede prevenirse un ambiente obesogénico (sedentarismo y consumo de alimentos con altos contenidos de azúcares, grasas y sal) a fin de evitar que entre en acción y detone la enfermedad. A futuro el propósito es identificar estos SNP´s, realizar medicina preventiva y buscar medidas a fin de evitar que se expresen”, explicó Del Río Navarro.
La doctora Blanca del Río especialista en alergias identificó en la etapa inicial de su investigación el genotipo de mil 156 mestizos que incluían 683 casos de obesidad y 473 testigos con peso normal para buscar 9 SNP´s en los genes que han demostrado relación con la obesidad.
En la segunda etapa del estudio se demostró que en los niños y adultos mestizos había una relación del índice de masa corporal y la circunferencia de cintura con los SNP´s en los genes o cerca de ellos.
Existen cerca de 127 genes relacionados con la obesidad, la mayoría de las investigaciones se han hecho en población europea y asiática. Por lo anterior, la especialista del Hospital Infantil analizó las características en mexicanos para averiguar la relación de 26 polimorfismos de una sola molécula.
“Tras el primer filtro de genes, se seleccionaron 12 SNP´s para demostrar asociaciones nominales con las primeras 26, así como los rasgos de obesidad. Estos datos fueron obtenidos de tres grupos de individuos que incluían a mil 218 niños mestizos, 945 adultos mestizos y 543 indígenas”, explicó la especialista.
Las conclusiones de la investigadora fueron que los niños que presentan obesidad, un mayor índice de masa corporal y circunferencia de cintura se asocian con la presencia de estos polimorfismos y enfatizó en que a futuro esta información puede servir como blanco terapéutico.
Este hallazgo es importante, si se considera que la prevalencia de obesidad en adultos es de 71.2 por ciento, en los niños es 34.4, según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, mientras que en el caso de la población mexicana indígena se estima que es de 59.
La doctora Blanca Estela del Río Navarro quien pertenece al Sistema Nacional de Investigadores Nivel II, fue galardona con el Premio Anual de Investigación Pediátrica Aarón Sáenz por esta investigación, en colaboración del grupo del doctor Samuel Canizales a la cual nombró, “Contribución de las variantes genéticas comunes a la obesidad y los rasgos relacionados con la obesidad en los niños y adultos mexicanos”.
(Agencia ID)