Videojuego de «Emergencias Médicas Básicas», diseñado por niños de 10 años

Un grupo de niños estudiantes del Club de Ciencias Nikola Tesla, grupo de duvulgación científica autónomo de San Luis Potosí, creó un videojuego que capacita a chicos y adultos para intervenir de manera correcta ante un caso de urgencia médica. Diego Flores, Ángel Méndez y Gibran Cruz diseñaron el programa Emergencias Médicas Básicas (EMB) con la finalidad de enseñar cómo realizar adecuadamente una llamada al número de servicios médicos local.

El videojuego nace como resultado de la investigación realizada por los pequeños de 10 años de edad. Diseñado en Scratch, EMB comienza con la enseñanza de la marcación del número de emergencias, que a nivel nacional es 066. Posteriormente, la voz de la operadora realiza las preguntas básicas para la atención adecuada por parte de los servicios médicos, como ¿qué tipo de apoyo necesita?, ¿cuántas personas están accidentadas?, ¿la persona responde a estímulos?

Para las personas interesadas, el videojuego se encuentra en fase beta y está disponible al público en general solicitándolo vía correo electrónico.

Capacitando primeros respondientes

Diego Flores comentó que «el objetivo del proyecto es dar a conocer las técnicas para que niños y adultos puedan ser los primeros respondientes, esto es, la primera persona que va a ayudar a un herido, porque los primeros minutos posteriores a un accidente son muy importantes para la recuperación de la persona afectada».

El programa de capacitación complementa el videojuego con la instrucción práctica de qué hacer en caso de presentarse alguno de los incidentes más comunes. Como principio de la investigación, se estableció la hipótesis: «Un niño capacitado es capaz de auxiliar a una persona que ha sufrido un accidente», agregó Ángel Méndez.

La exploración del tema los llevó a conocer acerca del programa Primeros respondientes, con el cual se capacitaron con paramédicos profesionales del área para, a su vez, ser capacitadores de primeros respondientes. Una vez que identificaron el cuadro básico de emergencias probables era necesario realizar experimentación que validara el proyecto, para esto acudieron con sus compañeros de clase, quienes participaron en el experimento. Fue grato para los pequeños darse cuenta que mediante ejercicios sencillos, los asistentes pudieron aprender cómo conducirse en caso de una urgencia médica.

La prueba no se limitó a niños sino que ampliaron su campo de estudio a adultos, dándose cuenta que 70 por ciento de los encuestados no conocía el número telefónico en caso de accidentes ni los principios básicos de atención ante emergencias. Estos resultados les permitieron comprobar la pertinencia de su investigación, que ya ha sido presentada en diferentes espacios y ferias de ciencias.

En 2015, EMB fue nombrado proyecto sobresaliente en el segundo Encuentro de Pandillas Científicas de San Luis Potosí, y recientemente resultó ganador del evento regional Proyecto Multimedia de la misma ciudad, lo que les da el derecho para representar a México en la final continental que se llevará a cabo en la ciudad de Guadalajara Jalisco este mes de abril.

Resulta complicado que a un niño se le dé la responsabilidad de atender una emergencia; sin embargo, se presentan situaciones en las que los pequeños son los primeros respondientes; situaciones como esta se presentan a diario en las zonas de juego, donde es común que haya percances. Es así que resulta necesario capacitar a los infantes sobre qué tipo de emergencias pueden manejar y cómo hacerlo.