Claudia Peralta Vázquez
México requiere incrementar el número de científicos que tiene en la actualidad para aspirar a un alto nivel y poderío económico, aseguró Jorge Flores Valdés durante la conferencia magistral “Cinco décadas de la ciencia mexicana”, que dictó tras recibir la Medalla al Mérito Universitario por la Universidad Veracruzana (UV) en el marco de la Feria Internacional del Libro Universitario (FILU).
El científico mexicano dijo que si bien el Sistema Nacional de Investigadores (SNI) registra 24 mil hombres y mujeres dedicados a la ciencia, debería haber, mínimo, 200 mil.
Agregó que el único indicador en ciencia y tecnología en el que México aparece entre los primeros lugares en el mundo, es en el de la formación de licenciados en ingeniería, ya que egresan cerca de 100 mil cada año, más que en otras naciones de Sudamérica, como Brasil.
Para Flores Valdés, la ciencia que se hace en el país es excelente, “aunque muy pequeña, en algunos casos es de muy alta calidad”. Expuso que en 30 años la comunidad científica mexicana ha crecido de mil 400 a 24 mil; en 1958 había 100 doctores y ahora son 30 mil, de esa última cifra 10 mil trabajan en Estados Unidos.
En aquel tiempo se graduaban menos de cinco doctores, en la actualidad son tres mil anualmente; había dos facultades de ciencias y ahora es del orden de 30; se publicaban 30 artículos y hoy 15 mil cada año; de esas publicaciones se registraban 50 citas y hoy 50 mil, relató.
Puntualizó que aunque el gobierno federal ha implementado programas de becas de posgrados y las cátedras del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), debería haber una movilización de personal del SNI a instituciones de reciente creación para complementar estas cátedras, así como estancias de investigadores nacionales e internacionales.
Al referirse específicamente al estado de Veracruz, precisó que entre los años 2000 y 2015 el número de integrantes en el SNI creció de 140 a 707, es decir, se multiplicó por un factor de 4.5 en 15 años.
En el caso de la UV, durante ese periodo ha crecido 804 por ciento; y del total nacional, las instituciones veracruzanas participan con tres por ciento ocupando el noveno lugar después del Distrito Federal, Estado de México, Jalisco, Morelos, Nuevo León, Puebla, Guanajuato y Baja California.
Dio a conocer que en la entidad veracruzana, esta casa de estudios tiene las dos terceras partes de investigadores nacionales en sus aulas e institutos; seguido del Instituto de Ecología, Colegio de Postgraduados, Instituto Tecnológico de Veracruz y CIESAS.
Después de dar un balance sobre este tema, Flores Valdés recalcó que lamentablemente fue a finales de 1980 cuando la Secretaría de Educación Pública se dio cuenta de que la ciencia es algo importante para la educación, dando inicio a un ambicioso proyecto para instalar la ciencia en las universidades a través de posgrados.
Hoy en día hay investigación científica en casi todas las universidades estatales, no obstante la producción sigue siendo mayor en los estados del centro del país. De acuerdo a datos de 2006, entidades como Distrito Federal, Morelos y Puebla generaron las dos terceras partes de los artículos de investigación.
Lo anterior es muy diferente a lo que ocurría en 1960, cuando las publicaciones se realizaban únicamente en la Ciudad de México.
El impulsor de la ciencia en nuestro país abundó que las acciones globales del gobierno mexicano han sido pocas, pues transcurrieron 30 años para la creación del Conacyt. En 1984, también se dio un movimiento interesante para fortalecer la ciencia mexicana mediante el SNI.
“Queríamos que un representante de los investigadores mexicanos trabajara en algún sitio de la República Mexicana que no fuera el Distrito Federal, y con mucho trabajo se encontró a una sola persona.”
Por último, destacó que en los tres años del gobierno de Enrique Peña Nieto ha habido un incremento de uno por ciento para el respaldo de la ciencia y tecnología, lo cual se considera relevante dado que el número de investigadores no es muy grande.