En la reunión de la Sociedad Astronómica de Estados Unidos, realizada en Minneápolis, Estados Unidos, los radioastrónomos de la Universidad de Maryland anuncian haber detectado nubes acuíferas en la galaxia Markarian 1, ubicada a 200 millones de años luz de la Tierra, en la constelación Piscis.
Hasta entonces no se había detectado agua en lugares tan lejanos. Incluso el equipo que anunció el descubrimiento, lidereado por James Braatz, de la universidad de Maryland, habían rastreado 150 galaxias activas en busca de señales de agua.
El descubrimiento probó que el elemento necesario para la vida (al menos como se desarrolla en la Tierra) existe en lugares tan lejanos del Universo. Hasta entonces sólo se había localizado agua en cinco lugares del universo solamente, y todos muy cercanos a la Tierra, en la Vía Láctea.
En esa época numerosos estudios sugerían la presencia de vapor de agua en Venus, y también se consideraba que existía en Mercurio, Marte, la Luna y en la atmósfera inferior de Júpiter.
Según Jack Welch, director del laboratorio de radioastronomía de la universidad de California en Berkeley, este descubrimiento ‘»apasionante'» apoya la tesis de que puede existir agua en todas partes. ‘»Así, pues, hay una fuerte probabilidad de que existan seres vivientes en otros sitios'». Welch formaba parte del equipo que descubrió por primera vez indicios de agua fuera de la Tierra, en, 1969.
Este descubrimiento de agua tan lejana en el universo fue realizado por medio del radiotelescopio de Effelsberg en Alemania que lanza luz sobre los fenómenos de los ‘»megamáseres'» acuíferos.
Normalmente la firma electromagnética de las moléculas de agua es demasiado débil para poder ser detectada por los radiotelescopios terrestres, pero la galaxia Markarian 1, en la constelación de Piscis, a 200 millones de años luz de distancia de la Tierra emite mucha energía, tanta que los investigadores creen que en su centro existe un agujero negro. El agua se encuentra en las nubes que rotan a gran velocidad alrededor del centro de la galaxia. Eventualmente, el hidrógeno y el oxígeno que forman las moléculas de agua se separarán al ser éstas succionadas por el centro.
En esa misma reunión los astrónomos de la Universidad Jonhs Hopkins informan que tienen fuertes indicios de la existencia de un agujero negro con una masa de varios millones de soles en el centro de la galaxia de Andrómeda.