La producción de vainilla en nuestro país disminuyó de tal forma que México dejó de figurar entre los países productores de vainilla, a tal grado que en 2003 fue eliminado del selecto grupo de las 10 principales naciones vainilleras, apuntó Enrique Hipólito Romero, integrante del Centro de Investigaciones Tropicales (Citro), de la Universidad Veracruzana (UV).
Refirió que desde el 2008 se impulsa en la región de Papantla, el cultivo de vainilla en parcelas agroforestales, además de que desde hace ocho años, el Citro desarrolla una investigación en esta zona –que se caracteriza por ser productora de la planta-, para averiguar por qué disminuyó su cultivo, pese a que su precio en el mercado internacional va a la alza por su calidad.
Una de esas causas es el surgimiento de la vainilla sintética el mercado, producto que terminó de “desplomar” el cultivo de la orquidácea, “no hay una forma de competir con esto, lo que se ve reflejado directamente en las ganancias de los productores (mayoritarios), quienes en los últimos cuatro años ganan alrededor de 30 dólares por kilo de vainilla”, apuntó.
La vainilla es originaria de América y su proceso de producción se creo en México, pero aún así ahora su principal cultivo se da en Madagascar e Indonesia.
La planta fue conocida por los españoles cuando llegaron a Veracruz y le dieron este nombre porque su fruto se parece a la vaina de una espada diminuta
Hipólito Romero detalló que la región de estudio abarca 48 hectáreas (57 parcelas que pertenecen a 21 familias), las cuales son destinadas para la agricultura. De éstas, sólo 7.1 por ciento es dedicada a la producción de la vainilla, mientras que más de 69.98 por ciento es para el cultivo de naranjas, 10.36 por ciento es para el maíz y el restante entre diversos cultivos.
“Entonces, ¿qué hacen los pobladores para vivir?, ¿de dónde obtienen sus ingresos? Lo sorprendente es que 16 por ciento de sus ingresos provienen de los programas federales como Oportunidades y Procampo”, expresó sorprendido.
Esta situación que se vive en la región papanteca no sólo ha afectado los bolsillos de la población, sino que también ha provocado deforestación –por el cambio de los cultivos–, lo cual afecta la biodiversidad, al grado de ponerse en riesgo la existencia de la vainilla, relató.
Es por ello que desde hace cuatro años han tratado de aplicar un sistema agroforestal para aumentar la producción de la vainilla de calidad, donde las familias involucradas podrán comercializarla directamente.
“Dentro de este desbarajuste pensamos que si logramos conectar a estos hogares-productores con el nivel del consumo gourmet, podrían alcanzar ingresos de hasta 80 dólares por kilo de vainilla, cuando el pago es de tres dólares”, puntualizó.
En la actualidad, han establecido parcelas agroforestales en diferentes sitios de la región y a partir de los resultados arrojados se planea diversificar el esquema de producción agrícola.