El nuevo presidente de la Sociedad Española de Bioquímica y Biología Molecular (SEBBM), Federico Mayor Menéndez, ha dicho hoy a EFE que «la prima de riesgo» que mediría el diferencial de la investigación española con la europea «está volviendo a aumentar» por los recortes en ciencia e investigación.
Mayor Menéndez ha asumido hoy -«con responsabilidad y ánimos pese a los difíciles momentos actuales», ha precisado- la presidencia de la SEBBM, entidad que agrupa a cuatro mil científicos españoles, en una asamblea celebrada coincidiendo con el Congreso Internacional de Bioquímica y Biología Molecular que esta semana se celebra en Sevilla.
En una entrevista con EFE, Mayor Menéndez ha opinado que los avances científicos consolidados en España en las últimas décadas y que nos habían permitido acercarnos a los niveles europeos se ven ahora comprometidos por los recortes presupuestarios y por la falta de mejoras en la gobernanza de instituciones científicas y educativas españolas.
«Parecía que, con una masa crítica de investigadores y de centros de investigación, llegábamos a engancharnos al tren de la ciencia europea, y esto, ahora, lamentablemente, está en peligro; nuestra prima de riesgo científica, el diferencial con otros países líderes en el mundo, está volviendo a aumentar», ha advertido.
En su opinión, este distanciamiento se está produciendo con el agravante de que en el actual momento «de crisis global económica y también de valores, es más importante que nunca ser conscientes de la importancia del conocimiento».
«Las sociedades avanzadas tienen que tener unas capacidades críticas de generar conocimiento, transferirlo a las nuevas generaciones y transformarlo en aplicaciones; es algo fundamental para afrontar el futuro con ciertas garantías de éxito», ha subrayado.
Catedrático de Bioquímica y Biología Molecular de la Universidad Autónoma de Madrid, Federico Mayor Menéndez es hijo del también catedrático de Bioquímica y exdirector general de la UNESCO Federico Mayor Zaragoza, quien igualmente presidió en 1974 la SEBBM, entidad fundada hace medio siglo por investigadores como Severo Ochoa.
Ha recordado los avances trascendentales consolidados en la atención médica, los biocombustibles o los nuevos materiales, «surgidos de la investigación» y ha apostillado: «Está claro que la ciencia de vanguardia juega un papel fundamental en nuestro desarrollo y en nuestro bienestar».
Por ello ha exhortado a que no sean sólo los científicos los que demanden apoyos a la investigación sino que «la sociedad y los empresarios reclamen también que la ciencia tiene que ser una prioridad».
«La buena ciencia, la ciencia de calidad debe de apoyarse incluso en tiempos de crisis porque de ello depende, en parte, que podamos tener un papel protagonista en el futuro», ha añadido.
Autor de más cien publicaciones científicas y director de una veintena de tesis doctorales, Mayor Menéndez ha advertido del peligro de que la crisis cercene a algunas de las mejores generaciones de científicos españoles e impida su relevo generacional.
«La ciencia es algo tremendamente competitivo, y hay que darse cuenta de que la capacidad, no solamente de generar conocimientos, sino de aplicarlos requiere la formación de nuevas generaciones de científicos que sustituyan a las que por ley natural van desapareciendo», ha señalado.