Alphasat, el satélite de telecomunicaciones más grande y sofisticado de Europa, fue lanzado con éxito ayer por la noche desde el Puerto Espacial Europeo en Kourou, Guayana Francesa.
El lanzador Ariane 5 ECA, operado por Arianespace, despegó a las 21:54 (hora peninsular española), y liberó a Alphasat en la órbita de transferencia geoestacionaria prevista 28 minutos más tarde.
La estación de seguimiento de Inmarsat en Pekín recibió la señal de Alphasat en menos de una hora, confirmando que el satélite se encuentra en la ubicación prevista, encendido y transmitiendo.
Alphasat es un gran satélite de telecomunicaciones, de 6,6 toneladas, concebido principalmente para expandir la red de comunicaciones móviles de Inmarsat. Fue diseñado y construido por Astrium a través de una colaboración público-privada entre la ESA e Inmarsat.
La directora de Telecomunicaciones y Aplicaciones Integradas de la ESA, Magali Vaissiere, comentó: «Alphasat impulsará la competitividad de un operador europeo de telecomunicaciones, Inmarsat, asociado con la industria europea, en un campo con altas perspectivas económicas. Desde la ESA, estamos orgullosos de haber sido capaces de aunar las energías, las capacidades y los recursos necesarios para hacer frente a este proyecto».
Por su parte, el director General de la ESA, Jean-Jacques Dordain destacó que Alphasat combina con éxito varias colaboraciones: «La de la ESA y la agencia espacial francesa, CNES, para desarrollar Alphabus, la plataforma del satélite; entre dos grandes empresas europeas, Thales Alenia Space y Astrium; y entre los estados miembros de la ESA e Inmarsat».
Alphasat expandirá la red global de banda ancha de Inmarsat, proporcionando cobertura sobre Europa, África y Oriente Medio. Tiene 40 metros de envergadura y una vida útil de 15 años. Su avanzado procesador integrado, un elemento clave de la carga útil comercial, es capaz de realizar billones de operaciones por segundo, proporcionando servicios con una flexibilidad sin precedentes.
Llega la plataforma Alphabus
Además de incrementar significativamente los servicios de la flota de Inmarsat, también servirá para probar en vuelo la nueva plataforma europea de telecomunicaciones Alphabus, desarrollada por Astrium y Thales Alenia Space a través de un contrato con la ESA y con la agencia espacial francesa CNES.
La plataforma multiusos de alta potencia Alphabus está diseñada para el mercado de los grandes satélites de telecomunicaciones y responde a la creciente demanda de servicios de retransmisión. Es capaz de acomodar misiones comerciales con una carga útil de hasta dos toneladas y 22 kW, y sitúa a la industria europea en una posición muy competitiva en el mercado global de las telecomunicaciones.
En la producción de la plataforma, Astrium ha está a cargo de la fuente de alimentación eléctrica, los paneles solares, la propulsión química, y la conexión, la integración y las pruebas del satélite. Thales Alenia Space es responsable de los subsistemas mecánicos y térmicos, la aviónica (procesado de datos y el control de actitud) y la propulsión eléctrica, así como el montaje, integración y pruebas del Módulo de Servicio de Alphabus.
Según sus promotores, Alphabus es la plataforma más potente del mercado. Se trata de la respuesta de Europa a la creciente demanda mundial de grandes cargas útiles de comunicaciones, proporcionando más potencia para apoyar a la difusión directa de televisión, a la radiodifusión digital, y para los servicios móviles de banda ancha.
Con una capacidad de combustible propelente de hasta 4,2 toneladas métricas, la plataforma puede llevar cerca de 190 transpondedores de alta potencia (230 en la versión extendida), junto con una gran cantidad de antenas, hasta 12 antenas principales.
Además de probar esta plataforma, Alphasat también transporta cuatro cargas útiles de demostración tecnológica: un sensor de radiación y ensayos ambientales desarrollado por Efacec (Portugal), el experimento «Aldo Paraboni» en banda Q/V de Thales Alenia Space (Italia) y Space Engineering (Italia), un sensor de estrellas de Jena-Optronik (Alemania) y un terminal de comunicaciones ópticas desarrollado por TESAT (Alemania) y suministrado por el Centro Aeroespacial Alemán (DLR).